Un portón contiguo del reconocido centro comunitario San Cayetano, en barrio Ludueña, fue blanco de las balas que prodigaron desconocidos en la medianoche de este miércoles. El atentado estremeció a esa comunidad donde se destaca el espacio solidario que creó el párroco Edgardo Montaldo y que cumple una valiosa labor de contención y asistencia en esa barriada del noroeste de Rosario.

El ataque ocurrió hacia las 23.30, en Gorriti al 6000. Por fortuna, los disparos no causaron heridas en nadie, y solo dejaron la huella del terror sembrado en otra balacera más que registra Rosario. Para la misma hora, otros pistoleros abrían fuego contra la agencia de autos de Avellaneda e Ituzaingó, en Bella Vista.

El ataque al San Cayetano causó estupor y un amargo recuerdo por lo vivido en enero de 2013 en esas cuadras de Gorriti y Garzón donde Mercedes Delgado –madre colaboradora en el centro comunitario– quedó en el medio de un enfrentamiento entre bandas y murió baleada.