"Necesitábamos darle esta respuesta a los magistrados", admitió el ministro de Seguridad Maximiliano Pullaro en un tramo de su discurso, al anunciar los primeros resultados de la investigación que busca atrapar a los autores materiales e intelectuales de los graves atentados que alteraron la vida institucional de la provincia. "Había mucha preocupación social por si se estaba haciendo algo", reconoció en la misma línea el Fiscal Regional Jorge Baclini cuando le tocó hacer uso de la palabra. 

Las frases, que pasaron desapercibidas en medio de un fuerte anuncio que vinculó a Los Monos y a "Guille" Cantero con las balaceras, ratificaron lo que algunos operadores judiciales confirmaron luego fuera de micrófono: la presión por mostrar acción y resultados adelantaron los tiempos de una investigación a la que todavía le quedan muchos cabos por atar. 

"Lo mejor hubiese sido seguir trabajando en secreto, pero no se pudo", admitieron desde el Ministerio Público de la Acusación. Las dudas sobre si mantener el hermetismo o difundir los primeros avances se despejaron luego del ataque contra el Centro de Justicia Penal. Las críticas a la "inacción" del Poder Ejecutivo se agudizaron tras esos últimos balazos. 

"Pasaron dos meses desde los primeros ataques y no hubo ningún resultado en la investigación", se quejó el titular de la Corte Suprema de Justicia de Santa Fe, Rafael Gutiérrez, al perpetuarse el último atentado. Su frase "hay que hablar menos y hacer más" resumió el sentir de la mayoría de los magistrados ante una escalada de violencia inédita en la historia de la provincia. 

La conferencia de este mediodía se planificó pensando más en mostrar acción y dar una mensaje de fortaleza en medio de la lluvia de críticas, que en una necesidad estratégica de ventilar los primeros datos firmes de la investigación.

¿Cuál era el plus del silencio? La posibilidad de terminar de hilvanar el papel de Los Monos en la mayoría de los atentados con la guardia baja de los supuestos implicados. Hasta el momento solo se pudo comprobar el rol de instigador de Guille Cantero en las balaceras contra las propiedades vinculadas al juez Ismael Manfrín.

Algunas pistas marcan que los cabecillas de la banda estarían detrás de los atentados contra los magistrados que firmaron las condenas (Marisol Usandizaga, la otra víctima) y poco tendrían que ver con los ataques a las propiedades del juez Juan Carlos Vienna y de los ex agentes de la División de Judiciales, Luis Quevertoque y Ariel Lotito. "La sensación es que algunos aprovecharon la volteada", explicaron fuentes del expediente.

Los fiscales presentarán un "enjambre de escuchas telefónicas" en la audiencia imputativa contra Cantero y las dos personas que fueron detenidas para probar sus roles en las balaceras. En este sentido, Pullaro reconoció falencias en los controles dentro del Servicio Penitenciario para evitar el contacto entre los detenidos y los laderos que siguen respondiendo a la organización. 

"Estamos teniendo dificultades con los inhibidores de señales. Tenemos una política focalizada, pero lamentablemente tuvieron acceso a teléfonos que ya fueron secuestrados", afirmó el ministro.

Baclini adelantó que "Guille" Cantero será imputado por el delito de "amenazas agravadas" por haber atentado contra personas pertenecientes al Estado, figura que tiene una expectativa de pena de entre 5 y 11 años de prisión. La ventilación de su nombre no será gratuita. Fiscales y funcionarios del ministerio de Seguridad no descartan "más vueltos" por este contundente anuncio público.