"Dan ganas de irse. Ayer nos fuimos asustados, dejamos todo desacomodado así nomás. Si fueron como 14 tiros, había mucha gente en la calle. De milagro no murió nadie". El que mastica las palabras con desazón es Leandro, el muchacho que atiende la agencia de loterías en Génova casi Alberdi, al lado del quiosco donde este lunes al anochecer comenzó una inesperada balacera que dejó dos personas heridas.

El comerciante relató al móvil de Sí 98.9 los hechos que se precipitaron al lado de su local, en esa transitada esquina de Arroyito. "Todo empezó en el quiosco, no se sabe bien si quisieron robar o qué. El tipo entró y directamente disparó contra un muchacho, y enseguida salió en moto a los tiros. Fueron como 14 tiros", contó.

Más tarde, Guillermo, dueño del quiosco donde comenzó el ataque, dio su versión a este medio: "Fue una locura total. Estábamos con mi mujer y un amigo. Empezamos a sentir las detonaciones. A mi amigo le impactó en el brazo, por suerte está fuera de peligro. Lo que quiero aclarar es que esto no fue un robo. Casi ni ingresaron al negocio, tiraron 4 balazos y después se fueron tirando por la cuadra, uno contra la carnicería, y otro más antes de cruzar Antelo", relató.

El quiosquero se estremeció al rememorar que "entraron a tirar directamente. No hubo un aviso previo, un mensaje, un papelito, nada. Tampoco se llevaron nada".

"Fueron segundos, dicen que eran dos en moto. Pero no se mucho más, yo quedé en shock. El tema es cómo seguir ahora. Me levanto todos los días a las 7, trabajo todo el día para sobrevivir, de sol a sol, y ahora no se qué hacer", lamentó Guillermo.

"Insisto que esto no fue robo, fue tentativa de homicidio, mínimo, pero no sabemos por qué", concluyó. 

En una carnicería de la cuadra quedó la marca de dos balazos. Uno de ellos le acertó a una mujer, clienta del comercio, que en ese momento estaba comprando.

"Empezamos a escuchar disparos, nos metimos atrás tapándonos. Como 14 tiros, primero más cerca y luego alejándose. Tiró primero en el quiosco, y después por toda la cuadra. A una señora y al chico del quiosco los hirió", recalcó.

El episodio removió la herida reciente del vecindario, que todavía se estremece al comentar el asesinato del arquitecto Joaquín Pérez, ocurrido en octubre de 2021, a la vuelta, cuando guardaba su auto en una cochera y fue asaltado y baleado.

Los carteles en los comercios de la cuadra recuerdan aquel crimen. Y dan contexto a una serie de episodios de inseguridad que abonan las conversaciones diarias.

"No dan ganas de trabajar así, dan ganas de irse del país", concluyó Leandro.