Una bomba molotov fue arrojada este jueves por la madrugada contra una comisaría de la ciudad de Rosario, lo que provocó el incendio del auto de una empleada policial y daños en otros dos vehículos que estaban secuestrados en la dependencia. El método se asemeja al doble atentado a los sindicatos a comienzos de la semana pasada, despertando la sospecha de un objetivo de generar zozobra en la sociedad. 

Hay tres personas detenidas, dos jóvenes serán imputados este viernes, y un menor de edad que quedó a disposición del Juzgado a su cargo.

El hecho ocurrió pasadas las 4 de la mañana en Solís y Casilda del barrio Empalme Graneros donde según los primeros datos policiales, tres personas se acercaron a pie a la dependencia y arrojaron el explosivo y se dieron a la fuga.

El artefacto incendiario impactó contra un Volkswagen Gol que estaba estacionado en la puerta y que resultó pertenecer a la mujer policía que trabaja en esa seccional. 

El fuego provocó daños menores en otros dos automóviles que estaban secuestrados y que se encontraban junto al vehículo de la agente.

Como consecuencia del incendio, la parte delantera del Gol se vio seriamente afectada, quedando inutilizable el motor, mientras que los otros dos vehículos -un Chevrolet Cruze y una Renault Partner- que habían sido secuestrados por haber sido empleados en distintos delitos, quedaron con algunos daños.

El hecho fue denunciado al 911 y la investigación se encuentra en manos de la fiscalía de turno de Rosario.