Cuatro hombres quedaron detenidos este miércoles por la tarde, al cabo del allanamiento que ordenó el fiscal federal Claudio Kishimoto y la Procunar sobre el Puerto de Rosario, desde donde partieron en junio más de 1.400 kilos de cocaína con destino a Brasil y a Países Bajos.

Se trata de una partida camuflada en cargamentos de maní, y descubierta hace dos meses en el puerto brasileño de Santos, y en Rotterdam, el principal puerto holandés. Habían zarpado en dos buques, 568 y 866 kilos respectivamente.

Según el funcionario judicial, "los detenidos presuntamente usaban puntos ciegos en el puerto de Rosario para evadir los controles e introducir la droga sin ser detectados".

"La maniobra se llama Rip-Off. Es el embarque de mercadería ilegal en una destinada legalmente a exportarse", explicó el fiscal Kishimoto en declaraciones a una radio local.

Para el funcionario federal, "la maniobra es típica de películas" y "usaron el cargamento de maní como pantalla". La droga tenía etiquetas con la leyenda Louis Vuitton, igual que los panes que sumaron el 26 de agosto pasado.

Secuestran 1658 kilos de cocaína que iban a salir por el Puerto de Rosario

El juez federal Carlos Vera Barros firmó la orden de allanamientos sobre el muelle que controla Terminal Puerto Rosario, controlada por la aceitera en default Vicentin, y en domicilios de personas involucradas en la inserción del contrabando dentro de la carga de exportación legal.

Los investigadores creen que la droga fue incorporada a las partidas de maní a último momento, previo a zarpar, y luego de la inspección aduanera.

Allanaron el puerto de Rosario por narcotráfico: cuatro detenidos

Uno de los contenedores de maní que arribó a Rosario el 21 de junio provenía de la localidad cordobesa de General Deheza. Los operadores dejaron el container en un punto ciego para las cámaras de videovigilancia, y allí se sospecha que habría ocurrido la violación de precintos y el embute de la droga.

El buque con el container del contrabando salió el 28 de junio del muelle rosarino, pasó por Zárate y arribó a Santos el 5 de julio. Y otro en similar procedimiento fue descubierto en el puerto holandés.