Una persona murió y al menos 67 menores y 90 adultos sufrieron quemaduras o lesiones de distinta gravedad por mal uso de pirotecnia o impacto de corchos, riñas y otros incidentes vinculados a los festejos del Año Nuevo en todo el país. Puntualmente en Rosario se registraron solamente dos casos de heridos leves por pirotecnia, aunque otras dos personas debieron ser atendidas por recibir "balas perdidas" y hubo tres heridos por arma de fuego tras sendos ataques desde motos

En Misiones una persona murió a causa de heridas de arma blanca sufridas en una riña durante los festejos, mientras que los centros sanitarios de esa provincia también debieron asistir ocho casos de quemaduras por pirotecnia, doce heridos en riña de los cuales siete presentaban heridas de arma blanca, tres heridos en siniestros viales, un intoxicado por exceso en el consumo de alcohol y cuatro por inhalación de humo.

Entre los casos más graves que la guardia del Hospital del Quemado de la ciudad de Buenos Aires debió atender esta madrugada se encuentran el de un hombre que perdió un ojo por una bengala y el de un nene de 7 años que sufrió quemaduras extensas en su cuerpo por la explosión de una caja de pirotecnia que trasladaba el adulto a quien acompañaba.

En la ciudad bonaerense de La Plata, ocho niños debieron ser asistidos en el hospital de Pediatría Sor Ludovica a causa de lesiones provocadas por pirotecnia; fuentes de ese centro sanitario dijeron que “tres de esos casos son oculares, uno internado por una presumible perforación ocular” y el resto de los atendidos, con lesiones “en miembros superiores y de estos uno sigue internado”.

En la ciudad de Córdoba, siete personas resultaron con heridas leves por el uso de pirotecnia y debieron ser asistidas en el Instituto del Quemado de la capital provincial; dónde la jefa de guardia, Analía Riutort, aclaró que cuatro eran menores y que “ninguno quedó internado, ya que en todos los casos fueron quemaduras menores”.