Schmuck: "Queremos que la noche sea mejor para salir y para convivir con los vecinos"
La titular del Concejo, satisfecha con la nueva ordenanza de nocturnidad consensuada, explicó los avances logrados con cada cambio.
La presidenta del Concejo municipal, María Eugenia Schmuck, se mostró satisfecha con los consensos logrados entre ediles y que permitieron suplantar la ordenanza 7218/01, que había quedado obsoleta en su función de regular la actividad de esparcimiento y espectáculos públicos nocturnos. “Venimos de una ordenanza que estuvo vigente más de dos décadas. Todos sabemos que estaba desactualizada porque sólo apuntaba a ordenar la nocturnidad en rubros estancos, que generaba problemas para la habilitación de locales, el desarrollo de nuevas propuestas, la convivencia y el control”, expuso.
El desafío –dijo– que había quedado explícito en la audiencia pública del 18 de junio, “era encontrar un equilibrio entre el descanso de los vecinos, las demandas de los jóvenes y los intereses de los empresarios, temas que fueron íntegramente receptados en la nueva ordenanza”.
De acuerdo con eso, “los criterios de insonorización, las condiciones de habilitación para preservar el entorno, los ingresos y egresos de los establecimientos, los locales aptos para gastronomía y para la difusión de música, las limitaciones en función de la ubicación geográfica, el factor ocupacional y el registro de oposición fueron temas analizados en profundidad y escuchando a todas las partes involucradas”, afirmó la concejala.
“Queremos que en Rosario haya más lugares para salir y entretenerse, pero que puedan convivir con los vecinos sin conflictos”, sentenció.
“Estamos dando respuesta a la necesidad de padres y madres de adolescentes cuyos hijos terminaban en fiestas clandestinas que se realizaban en localidades cercanas a Rosario; sin control ni condiciones de seguridad. También estamos dando pasos para mejorar la calidad de vida de los vecinos que tienen derecho a descansar, exigiendo a los empresarios que realicen las inversiones necesarias", ponderó la concejala.
En este marco, recordó: “Cuando nosotros éramos jóvenes, Rosario tenía una vida nocturna con noches para estudiantes universitarios, para menores de edad, para parejas, para solos, y de jueves a domingo se podía contar con una multiplicidad de propuestas. Pero no sirve añorar, sino recomponer. Y eso estamos haciendo”.
Los cambios
Schmuck explicó en resumen que “la nueva ordenanza elimina la clasificación por rubros, y la reemplaza por un sistema de licencias que pone como eje central la difusión musical y la insonorización de los establecimientos”.
Respecto del horario de cierre, se aprobó que los establecimientos cuya superficie útil sea mayor a 300 metros cuadrados, podrán extenderse hasta las 6 am y los de menos de 300 metros cuadrados lo podrán hacerlo hasta las 4.30 am.
En cuanto al factor ocupacional, se equipara a todos los establecimientos que podrán tener un máximo de cuatro personas por cada 2,30 metros cuadrados de superficie útil, con un margen flexible en función de la cantidad y ancho de las salidas de emergencia, los servicios sanitarios y las condiciones de insonorización. Los subsuelos o plantas altas deberán contar con medios de evacuación en forma directa a la vía pública.
Además, se incorporan permisos especiales para la realización de eventos o fiestas que, por sus características, no se desarrollan en lugares habilitados con ese fin.
En cuanto a la seguridad, se mantienen las exigencias actuales de seguridad interna y externa, a fin de evitar disturbios que afecten el descanso, incorporando la higiene en las veredas y haciendo hincapié en la desconcentración ordenada de quienes asisten.
“La aprobación de la ordenanza debe ser un puente entre la noche que tenemos y la noche que queremos. La forma de diversión de las nuevas generaciones cambia rápidamente y no espera a la legislación. Esta ordenanza es amplia y está preparada para acompañar no sólo la diversión como hoy la conocemos -muy distinta a la de hace 20 años- sino también la que todavía no conocemos; es una norma pensada con un sentido de futuro”, finalizó Schmuck.