La especulación inmobiliaria en Rosario parece no tener límites ni respetar la historia y el billete le gana al sello de toda una ciudad. En las últimas semanas se supo que pronto la esquina de Mitre y Pasaje Simeoni, frente a la "plaza del Che", dejará de ser lo que es, y lo mismo puede ocurrir con la icónica sala del cine Arteón, en Sarmiento y Córdoba. Frente a este panorama le reclaman al Ejecutivo local que brinde algunas explicaciones.

Al respecto, la concejala Norma López, que forma parte de la Comisión de Cultura, dijo a Rosarioplus.com que “la gestión del Frente Progresista no está protegiendo al patrimonio social, histórico, edilicio y cultural de la ciudad”. Para la edila, hubiese sido importantísimo que la dirección de Patrimonio, bajo la órbita de la secretaría de Planeamiento, catalogue la propiedad del pasaje céntrico.

Vale decir al respecto, que en su momento, con la sanción de la Ordenanza Nº 8245/08 de "Inventario y Catalogación de Bienes del Patrimonio Histórico Arquitectónico y Urbanísticos de la Ciudad de Rosario" se definió una política de preservación por parte del municipio, al precisar no sólo los inmuebles catalogados, sino también las acciones específicas a realizar en todo tipo de intervención que los afecte directa o indirectamente.

Sin embargo esta vieja propiedad, una de las últimas con sesgos de almacén portuario, donde funcionó hasta hace poco el bar cultural Jekyll And Hyde, más la legendaria parrilla Don Alberto, que sigue pese al traspié de la pandemia, no está dentro de este esquema de rescate. Igualmente López sostuvo que por más que algunas casas y edificaciones estén bajo el catalogo patrimonial “también pasan por la picota”, asimismo la concejala justicialista sostuvo que esto sucede “porque hay un relajamiento de los controles del Estado municipal”.

“No se trata de impedir la construcción que es una de los motores de la economía, pero si se trata de poder proteger a la historia de la ciudad, a lo que fueron los cimientos, y no sólo desde una mirada arquitectónica, también desde lo cultural. En ese sentido creemos que hay alternativas para poder sostener parte de estos sitios, por ejemplo de la mano del fomento, lo que no significa que sean lo desarrolladores quienes pongan las reglas del juego”, remarcó.

En la mañana de este martes, el intendente Pablo Javkin, en presencia de los medios locales, evitó hacer referencia al caso. Apenas dijo: “Mitre y Zavala (Pasaje Simeoni) me toca en el corazón, es mi barrio y además es un lugar donde la esquina tiene el nombre de un poeta que muchos amamos. Ese es un terreno que como tiene salida por calle Mitre tiene algunas condiciones legales, vamos a ver qué alternativas legales se pueden dar, hasta ahora lo que se ha dado es la compra de la propiedad”.

En ese sentido, López recordó que cambiar el nombre a esta cortada tuvo sus vericuetos políticos. “Hicimos una gran movida cultural para que a la cortada se le pusiera el nombre Fabricio Simeoni porque hubo mucha tensión con el municipio, porque no aceptaban, más allá que toda la sociedad le quería reunir un homenaje a Fabricio y en ese momento la municipalidad planteaba más bien cuestiones burocráticas para que no se pueda instalar su nombre, y lo logramos con la unidad de los artistas rosarinos, eso es un emblema por todo lo que significó él como intelectual y poeta”, remarcó.   

Entre los músicos que participaron de aquella movida figuran Coki Debernardi, Fabián Gallardo, Pablo Pino, Popono y Ber Stinco. Además de los artistas plásticos que intervinieron los muros del pasaje estampando el nuevo nombre a la calle de adoquines y los murales que esta semana fueron retirados por los nuevos propietarios.

Cabe decir que dicha esquina es una de las pocas de la ciudad que queda con el formato de retiro sin ochava, con su fachada de ladrillos al estilo de los viejos almacenes que rodeaban la zona del bajo rosarino, donde hace una centena de años supo estar el puerto de la ciudad. “Se tendría que haber generado otra mirada del Municipio, una vez más ocurre esto: te levantas un día y amaneciste sin una casa o una esquina con valor patrimonial”, remató López.    

Simeoni, autor de varios libros y ensayos, coordinador de talleres literarios y periodista, entre otras actividades, fue declarado Artista Distinguido en 2005 por el Concejo Municipal de Rosario y reconocido en 2007 como Artista Ilustre por la Legislatura de la Provincia de Santa Fe. Con 39 intensos años de vida, su corazón dejó de latir el 14 de octubre de 2013 tras sufrir un accidente cerebro vascular, dejando un legado enorme para todos los rosarinos.