El tránsito sobre el Acceso Sur, frente a Puerto Rosario, está bloqueado desde primera hora de este lunes porque la concesionaria del muelle persiste en su decisión de no dialogar con el gremio ante el despido de 50 obreros a pesar de la situación de conciliación obligatoria impuesta por el Ministerio de Trabajo. 

Como corolario de esta situación, los trabajadores en la protesta denunciaron que minutos antes de las 7 de este lunes fueron atacados a balazos por un hombre que llegó en un auto y disparó con un arma de fuego. No hubo heridos. En el piquete relacionaron el ataque armado con una acción intimidante ordenada desde el directorio de la empresa concesionaria.

Se recomienda transitar por la zona de Pellegrini y avenida Belgrano, también 27 de Febrero y Ayolas siempre en su intersecció con Acceso Sur.

Un piquete de trabajadores se instaló de nuevo para bloquear el acceso de cargas a las terminales I y II, y presionar a la operadora (integrada por Vicentin y la chilena Ultramar SA) a que se allane a la instancia de negociación abierta.

El sindicato Supa viene desde agosto intentando negociar una mejora salarial, pero la respuesta patronal fue desafectar en dos tandas a 50 operarios.

"La empresa sigue en su postura y resuelta a despedir la gente", dijo un trabajador en el piquete. "Buscamos que el gobierno se haga cargo de los trabajadores porque la empresa pareciera que buscan que la echen de la concesión. Tenemos una reunión en el Enapro, pero no tenemos mucha expectativa porque Gustavo Nardelli el sábado hizo provocaciones para que reaccionemos", contó un operario del puerto en alusión al CEO de TPR. 

TPR no solo que desoye el reclamo gremial sino que además deja en evidencia su falta de inversión en infraestructura y mantenimiento, algo que preocupa al todavía inactivo Enapro. 

Los portuarios reclaman como una medida de recomposición urgente un bono extraordinario de 120.000 pesos y, además, la incorporación a planta de otros trabajadores precarizados para contratación "eventual". 

"Pedimos que el salario acompañe la inflación, que mes a mes nos pega en la cabeza. Esto golpea a las familias, y si es por la paritaria, hasta el año que viene no podremos negociar. Y ahora en enero, hasta abril, el puerto casi deja de operar por que el trabajo merma", dijo César Aybar, secretario general del Supa.