La concejala Marina Magnani y el edil Andrés Giménez, de Unidad Ciudadana presentaron este martes una iniciativa para aplicar el uso del lenguaje inclusivo en la redacción de proyectos legislativos y la documentación interna del Palacio Vasallo.

La iniciativa fue ingresada en la comisión de Gobierno del Concejo, pero su presidenta, María Eugenia Schmuck, consideró que la propuesta debía abordarse en el marco de la comisión de Labor Parlamentaria del próximo jueves.

"El proyecto no habla del uso de la e, sino de adaptar la forma de redacción como se hizo en el Manual de Estilo del Senado de la Nación y en protocolos académicos, donde se redacta utilizando expresiones que incluyan ambos géneros", explicó Magnani, en diálogo con Rosarioplus.com, y agregó: "Y en caso de no ser posible se puntualiza 'el' o 'la', o terminación masculina y femenina".

Actualmente, la Cámara Alta cuenta con el “Manual de pautas de estilo, composición, corrección de documentos legislativos y ediciones parlamentarias” que tiene como finalidad establecer criterios de redacción que faciliten la producción de textos legislativos, entre esos criterios se encuentra la inclusión de lenguaje no sexista. 

Asimismo, en la Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco –primera en aprobar el uso del lenguaje inclusivo- y la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires (UBA) cualquier texto de orden académico puede incluir el uso del lenguaje inclusivo. La resolución aprobada por el Consejo Directivo de esta última casa de estudios señala que el lenguaje con el cual nos comunicamos y relacionamos los seres humanos reflejan las desigualdades existentes entre los géneros, naturalizando así la segregación, discriminación o exclusión.

En Rosario, la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional de Rosario y el Instituto Politécnico también aprobaron el uso del lenguaje inclusivo en la comunicación institucional y las producciones de los alumnos y las alumnas, enfatizando en que la formación académica debe estar atravesada por un enfoque de derechos para, así, seguir conquistando y construyendo igualdad y respeto mutuo en toda la comunidad.

En cuanto a la aprobación del proyecto, la edila peronista anticipó que no debería haber oposición por parte de sus colegas, ya que se trata de una iniciativa que busca adaptar la forma de redacción de las normativas como ya se hizo en el Senado de la Nación.

Sin embargo, el concejal de Cambiemos, Gabriel Chumpitaz se manifestó en contra de la iniciativa y afirmó: “Me exprese en contra de este proyecto por considerarlo impositivo e irresponsable, ya que confunde al ciudadano y no prioriza los verdaderos temas que tenemos que debatir en Rosario”.

"Para desobedecer a la RAE (Real Academia Española) que se expresó por la negativa, hay que tener fundamentos”, aseguró el diputado provincial electo, en diálogo con Rosarioplus.com, y concluyó: “Si realmente queremos ser inclusivos como sociedad, deberíamos promover el lenguaje de señas y dar una verdadera oportunidad de integración a sordomudos y personas con capacidades diferentes”.