El jefe de Gabinete, Marcos Peña visitó este sábado la ciudad de Santa Fe, acompañado del ministro del Interior, Rogelio Frigerio, y el intendente santafesino, José Corral, para presentar el plan de construcción de viviendas para la relocalización de familias en situación de riesgo hídrico. El funcionario aprovechó la ocasión para pegarle al gobierno anterior al afirmar que "durante muchos años la verdad se puso debajo de la alfombra", en relación a los juicios de jubilados contra la Anses.

En declaraciones a Télam, Peña resaltó que "tenemos todo para terminar definitivamente con la pobreza y una señal de la pobreza es la falta de viviendas. Que avance este proyecto en Santa Fe es una señal clara de pasos concretos a revolver la problemática de la vivienda. Trabajamos fuertemente en eso como equipo".

Consultado sobre los anuncios que hizo el presidente Mauricio Macri sobre el blanqueo de capitales y jubilados, Peña dijo que "sin dudas, ese anuncio fue histórico, es resolver la deuda con los jubilados que era motivo de vergüenza para nuestro país", y resaltó que "las primeras conversaciones con diputados y senadores vemos que hay un espíritu bastante amplio de acompañamiento. Aspiramos que todos los sectores políticos nos unamos para cerrar esa herida y que nuestros abuelos tengan la jubilación digna que se merecen".

"Es financiable, por fondos de la Anses como lo que ingrese por el blanqueamiento de capitales", dijo el ministro y sobre la posibilidad que el senador justicialista, Miguel Pichetto presente un proyecto propio sobre este tema, Peña añadió que "siempre estamos dispuestos a dialogar, ese es uno de los grandes cambios de esta Argentina de hoy, el Congreso funciona de verdad, hay diálogo y todos los proyectos se trabajaron, discutieron y estamos abiertos a debatir".

Sobre la visita al Vaticano de la titular de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, y su encuentro con el papa Francisco, destacó que "nosotros tenemos un enorme respeto y afecto por el Papa. Creemos que todos los argentinos tenemos que unirnos tras ese sentimiento. No tratar de llevarlo a la política interna, entender que lo que él hace, es función de su tarea, que desde ya es muy importante, no solo para los argentinos sino para toda la humanidad".

"No interpretamos su accionar como injerencia en la política interna. Nos parece bien, que las personas dialoguen. Es una necesidad que los argentinos nos encontremos, a través del diálogo, de la palabra", agregó.