Cristina Fernández volvió a hablar. Esta vez, aseguró que "el gobierno saca todos los días un conejo de la galera para distraer a la gente de la situación económica" al salir de la Federación Gráfica Bonaerense donde fue a despedir los restos del dirigente de la CGT de los Argentinos, Raimundo Ongaro.

En diálogo con los medios presentes, la ex presidenta pidió que “no distorsionen las palabras" de Eugenio Raúl Zaffaroni, al ser consultada por supuestos dichos del juez sobre la posibilidad de que ella pueda ir presa.

Lo que dijo Zaffaroni es que "si se agrava la situación económica y el gobierno quiere distraer a la opinión pública, puede suceder eso. Si se agrava la situación económica del país, no le cambies las palabras a Zaffaroni”, agregó.

“La idea, por lo que también le está pasando a otro dirigente de nuestro espacio político que fue candidato a presidente, me parece que lo que esta gente quiere fundamentalmente es armarle causas penales a todos aquellos que ellos piensan que pueden ser candidatos o pueden obstaculizarles una elección”, expresó en relación a las denuncias contra el ex gobernador bonaerense Daniel Scioli.