El presidente Mauricio Macri volvió a pisar territorio santafesino, este miércoles al mediodía, para encabezar la primera Mesa Nacional de la Soja, en la cual se fijará una agenda de trabajo con el objetivo de mejorar la competitividad de la cadena sojera, principal sector exportador del país. 

Antes de arribar a la planta, el mandatario aterrizó con su helicóptero en el club Río Negro para recorrer por algunos minutos por barrio Belgrano.

Macri vino una docena de veces a Santa Fe desde que es presidente. Esta vez la cita fue en la planta de Renova ubicada en la localidad de Timbúes, y además del Presidente asistió el ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica, y el de Transporte, Guillermo Dietrich, además del secretario de Agroindustria, Luis Miguel Etchevehere.

El encuentro se realizó en la planta de molienda de soja más grande del mundo como lo es la de Renova, una asociación entre Vicentín, de capitales nacionales, y Glencore, multinacional con sede en Suiza. Durante el encuentro se trató la situación de la industria de molienda de soja que, con una capacidad ociosa proyectada para este año del 46%, atraviesa un ‘complejo momento por las fuertes caídas en el procesamiento debido a la primarización de exportaciones”.

Esta situación se debe, según los privados, a las mayores ventas de poroto de soja y a la carga tributaria, que favorece la comercialización al exterior del poroto de soja. Aunque desde el sector exportador también han criticado la suba de los derechos de exportación.

Por el lado empresario participarán las cuatro entidades gremiales de productores (Sociedad Rural Argentina, CRA, Coninagro y Federación Agraria), las bolsas de Cereales de Buenos Aires y Córdoba, la Bolsa de Comercio de Rosario, Acsoja (Asociación de la Cadena de la Soja), Ciara (Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina) y CEC (Centro de Exportadores de Cereales), Carbio (Cámara de Biocombustibles), CPPC (Cámara de Puertos Privados Comerciales) y ASA (Asociación Semilleros Argentinos), entre otras.