La visita de Mauricio Macri a la provincia de Santa Fe fue verdaderamente fugaz, a punto tal que el propio gobernador Miguel Lifschitz manifestó que no hubo tiempo para un diálogo profundo. El presidente pasó por la ciudad capital y luego por Rosario, donde mantuvo una breve reunión y se limitó a dialogar con nada más que un medio de comunicación.

"Fue una visita cronometrada, no hubo demasiado tiempo, algunos comentarios al pasar entremedio del acto", respondió el primer mandatario provincial cuando este domingo se lo consulto respecto de lo que había dejado el encuentro con Macri en la inauguración de ocho casas en la ciudad de Santa Fe.

Diplomático, Lifschitz marcó que "siempre es importante que el presidente esté en la provincia de Santa Fe", pero igualmente, como ya lo había hecho, volvió a reclamar ayuda porque "necesitamos muchas viviendas".

El gobernado,junto al Intendente de San Lorenzo, Leonardo Raimundo, participaron de los actos conmemorativos del 204º Aniversario del Combate de San Lorenzo. Allí el máximo representane del Ejecutivo provincial brindó algunas declaraciones a la prensa.

El caso Cella

Miguel Lifschitz fue consultado respecto del caso del abogado penalista Marcos Cella, detenido primero acusado de haber participado de un homicidio y luego liberado bajo fianza. El gobernador se limitó a responder que "nos parece importante que la Justicia avance y no haya privilegios".

Al letrado se le imputó el delito de homicidio en grado de partícipe secundario por el asesinato de Lorena Ojeda. Por el mismo hecho, Ariel Tuby Segovia fue imputado como autor intelectual del crimen, en grado de instigador.