La tensión dentro del Frente Progresista entre el socialismo y la UCR ha despertado. Con las elecciones de medio término cada vez más cerca, volvieron las diferencias: la UCR quiere desdoblarlas (que la elección de concejales e intendentes sea en una fecha distinta que la de diputados nacionales) y, si no, advierte la ruptura con el Frente.

Desde hace unos meses se preveía que esta situación en algún momento sucedería. La UCR de Cambiemos tiene los pies en los dos platos: hace unos meses decidió que irá en las listas de diputados nacionales con el PRO, pero a nivel provincial podrían integrar nuevamente el Frente Progresista.

Y he aquí el pedido taxativo de los radicales guiados por José Corral y Julián Galdeano. Si se separan los comicios no tendrían dificultades de seguir en los dos lados, pero si se unifican -como quiere el socialismo-, quedarían tironeados entre Cambiemos y el Frente Progresista.

Este último escenario parecería declinar hacia la ruptura. El diputado radical Galdeano dijo que si el gobernador Miguel Lifschitz no desdobla las elecciones "va a poner en serio riesgo el Frente”. “Si hacemos las elecciones en la misma fecha, va a ser la crónica de una muerte anunciada", dijo en Radio de Noticias. Quizás sirva como una suerte de excusa para acelerar el quiebre de la alianza definitivamente y que no haya más amagues. 

Fue el propio intendente de Santa Fe, José Corral, quien le pidió a Lifschitz que desdoble las elecciones: "Es lo que conviene. Nosotros pensamos que hay que separar la competencia local de la nacional porque son dos sistemas y realidades políticas diferentes”.

Por el lado del socialismo,  el vicegobernador y radical Carlos Fascendini respaldó al gobernador y consideró que en Santa Fe las elecciones de medio término se han unificado siempre como en 2013.