El gobierno de Santa Fe analiza por estas horas descontar los días de paro a los docentes dispuesto por Amsafé y Sadop para esta semana, tal como había advertido el ministro de Gobierno, Pablo Farías. Así, endurecería su postura tras un mes de negociaciones y tres ofertas salariales. 

La Provincia apostaba a que los gremios aceptaran la oferta el viernes pasado, al entender que era la mejor propuesta posible en términos de salario. Sin embargo, las asambleas rechazaron el 25 por ciento en tres cuotas y dispusieron dos días de paro. Esto marcó un quiebre en la postura de la administración provincial, que ahora advierte que descontaría los días de paro.

Cuando se efectivizaron las primeras medidas de fuerza principio de marzo, el ministro había dicho que el descuento se aplicaría en caso de que los gremios persistieran en el reclamo de una manera arbitraria. “Si las medidas continúan y nosotros consideramos que no son apropiadas, o que la prolongación empieza a afectar seriamente la enseñanza, se va a producir el descuento”, dijo en su momento.

El gobernador Miguel Lifschitz fue el primero en marcar la cancha, incluso antes de conocer la negativa de los gremios. A media semana acusó a los sindicatos de "tensar la cuerda" en el marco de la negociación salarial y advirtió que era "la mejor" y última oferta que podían hacer.

Luego la ministra de Educación, Claudia Balagué, afirmó que en algunos departamentos de la provincia los maestros no tuvieron la opción de aceptar la oferta oficial entre las mociones para votar y anticipó que prolongarán el ciclo lectivo “para recuperar los días de clase” perdidos por la sucesión de paros.

Desde Amsafé entendieron los dichos de la ministra como una muestra de querer enfrentar a los gremios docentes con la sociedad. Esta semana, luego de los paros dispuestos para miércoles y jueves (coincidente con el paro nacional de la CGT), podrían volver a sentarse a negociar, aunque nada está definido por estas horas.