El fiscal general de Santa Fe, Jorge Baclini, presentó esta semana ante la Legislatura provincial su informe de gestión, en un documento de balance sobre el desempeño del Ministerio Público de la Acusación desde 2014, año en que comenzó a regir el sistema penal acusatorio. Y de las estadísticas reveladas, resultó que la eficacia del organismo queda en tela de juicio. Por cierto, levantó los primeros murmullos de reprobación.

Es que el informe reconoce que más de la mitad de las investigaciones encaradas por los fiscales de la provincia no tienen identificado al autor o a los autores del delito en cuestión. Ocurre que de las 147.483 investigaciones abiertas durante 2022 (un promedio de 404 legajos nuevos por día), el 59 por ciento (87.054 casos) no tiene autor o autores individualizados. Mientras que el 41% (60.429 causas) sí cuentan con alguna persona imputada del delito investigado. ç

La tendencia es similar en la trayectoria total del MPA. Desde 2014, los fiscales investigaron 1.217.735 denuncias, pero el 54,8% quedó sin que se sepa el o los autores; y el 45,2% de los casos sí tuvieron imputados.

En estos 9 años del nuevo sistema penal, al presente, de todas esas investigaciones se encuentran abiertas 662.171, (502.347 sin autores identificados); mientras que finalizaron 555.614, de las cuales 164.881 quedaron sin haber identificado a los autores, o al menos sin haber imputado a nadie.

Baclini –que esta semana dejará de ser el titular del MPA luego de 6 años, para ceder el cargo a María Cecilia Vranicich– expuso que el 2022 fue el de mayor cantidad de legajos creados en un año desde 2014: 263.172 casos. Y en este universo, 6 de cada 10 se originaron en jurisdicción de la Fiscalía Regional 2, que es el área Rosario.

El campo de acción del MPA en estos primeros 7 años ha sido prevalente en delitos contra la propiedad, el 35% (707.000 casos desde 2014).

Por otra parte, el fiscal general reseñó que el año pasado sus dirigidos realizaron más de 25.000 audiencias de primera instancia, y más de 1.900 de segunda instancia. En el caso de las primeras, en el 2022 se registró la cantidad más elevada de toda la serie: 69 audiencias por día, en promedio. 

Del volumen de causas encaradas, hubo 303 que llegaron a juicio oral en 2022 en toda la provincia, el año que más tuvo. Desde 2014, año de comienzo del sistema acusatorio, se celebraron 1.427 juicios orales. 

En el balance del MPA se incluye la tasa de encarcelamiento en la provincia. Alcanzó el máximo en 2022, con 263 personas detenidas cada 100.000 habitantes, más del doble de lo que registraba al finalizar el sistema penal inquisitorio (escrito).

El 2022 terminó con 9.350 personas detenidas en Santa Fe, de las cuales 5.231 estaban en prisión con condena, pero 4.119 lo estaban sin condena. 

Cuando el sistema acusatorio comenzó, en 2014 se habían contabilizado 4.560 personas privadas de la libertad. 

Los principales motivos por los que la gente va presa en Santa Fe son robo (2.937), homicidio doloso (1.835), y delitos sexuales (1.423). En cambio, por asociación ilícita hay 269 personas detenidas. Un rasgo que permite inferir el criterio de la política de persecución criminal que han desplegado los fiscales en esta provincia desde 2014, primero bajo gestión de Julio De Olazábal, y luego de Jorge  Baclini.

El dato no pasó por alto para el diputado Carlos Del Frade: “De 2 millones (SIC) de expedientes iniciados en el MPA desde 2014, solamente 338 se hicieron por asociación ilícita. Y hubo solamente 100 causas iniciadas por lavado de activos en la provincia entre 2014 a 2022. Y 16 en 2022. La famosa ruta del dinero no es transitada por casi nadie.”, señaló.

El criminólogo Enrique Font, por su parte, también atendió al jefe del MPA y su desempeño a través de su cuenta en Twitter:

Tweet de Enrique Andrés Font