La causa por la aparición de cajas de alimentos pertenecientes a la red de distribución de la Secretaría de Desarrollo Humano de la Municipalidad de Rosario en la casa de Ariel Viejo Cantero, acusado recientemente de liderar una banda extorsiva, además de su abultado prontuario, inició un posible frente de tormenta para el intendente Pablo Javkin, quien rápidamente se movió para desactivarlo y desterrar toda posible sospecha de vínculo entre política y la criminalidad organizada.

La estrategia comunicacional del intendente fue marcar un contraste entre la banda conducida por el exlíder de Los Monos y el resto de la ciudadanía. Para eso metió mano a los Juegos Suramericanos como ejemplo del modelo que se pretende para la ciudad: familias en las calles, deporte, y juventud. Enfrente colocó a la mafia y se refirió en reiteradas oportunidades como "la mugre". Así, implanta un clivaje, un versus que, si bien ya existe entre ciudadanía y criminales, creyó necesario acentuar y limpiar todo tipo de suspicacias hacia la gestión. Redoblar y salir políticamente para delante.  

"No le vamos a dejar que ganen y que la ciudad esté alrededor de lo que ellos quieren. Esto se arreglará cuando todos vayamos juntos y a fondo contra esta mugre. La gente que estuvo en los juegos estos diez días, o lleva a sus hijos a hacer deportes o al parque. Para esa gente hay que gobernar, y para eso hay que combatir esta mugre".

"Vamos a golpear todas las puertas que hagan falta. No puede haber ninguna grieta, ni discusión, ni ninguna duda, ni sospecha, ni nada. Tengo en claro que hay que hacer y a quién defender", dijo en Sí 98.9

Javkin, las cajas de Pandora y el discurso anti "mugre"

En un primer momento el oficialismo sintió el golpe de ver las cajas en la casa de Cantero, y, más aún, cuando la Secretaría de Desarrollo Humano y Hábitat ardió intencionalmente el domingo 1° de mayo. Alguien encendió la mecha para que las llamas oculten algo, probablemente la trazabilidad de las cajas. Igualmente quedó en claro en la audiencia sobre balaceras extorsivas contra Ariel Cantero, que incluye el hallazgo de las cajas del plan Incluir, que la Municipalidad derivó en regla a asociaciones civiles los alimentos y hubo una que los giró de manera irregular al exlíder de Los Monos.

El oficialismo empuña eso para decir que hizo todo lo correcto e incluso presentó la información en la fiscalía. Sin embargo hay margen para hablar de negligencia en el reparto. Por lo pronto la Municipalidad se presenta como damnificado y no como parte de las responsabilidades.  

"Conozco como opera esta gente, su intención de repartir mugre para todos lados. ( ...) Los mismos que amenazan a jueces y fiscales, o baleaban estaciones de servicio y escuelas. Eso es esta gente. Así que a la mugre, transparencia". Otra escena de "mugre" como forma de generar miedo a la sociedad pueden apuntar las autoridades: el domingo por la tarde cuatro ladrones armados arribaron en dos motocicletas al Parque Scalabrini Ortiz y acabaron con la tranquilidad de quienes allí estaban disfrutando del día. 

Javkin: "Hay grupos organizados que construyen en la mugre"