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Los medios de comunicación internacionales destinan varios minutos y caracteres al conflicto diplomático entre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el líder norcoreano Kim Jong-un. Sin embargo, las potencias mundiales no protagonizarán la "guerra" más importante de la región sino que lo harán las provincias de Tucumán, Córdoba y Jujuy.

A diferencia del país norteamericano y el asiático, que mantienen un enfrentamiento por la exposición de armamento nuclear, en Argentina el conflicto se desata por el azúcar, el fernet y el maní. 

La pugna entre las provincias argentinas comenzó hace dos semanas, cuando el Concejo Deliberante de la ciudad de Córdoba aprobó un proyecto que limita la provisión de azúcar en locales gastronómicos, una iniciativa que podría ser adoptada en Rosario.

La ordenanza generó un profundo malestar en Tucumàn, donde se concentran una gran cantidad de ingenios azucareros. La Legislatura convocó a una sesión especial con el único objetivo de tratar el tema del azúcar y la restricción cordobesa a ese consumo.

Aunque parezca un absurdo, oficialistas y opositores rechazaron por unanimidad la medida tomada en Córdoba y algunos legisladores propusieron "tomar revancha", prohibiendo en Tucumán los productos típicos cordobeses: el salame de Colonia Caroya, el maní y hasta el fernet.

"Ni maní salado, ni maní con chocolate. Nada de maní", afirmó el legislador radical Rubén Chebaia, durante su intervención en la Legislatura.

Ante el anuncio de los políticos tucumanos, a los cuales se sumó el gobernador de la provincia Juan Manzur, el intendente de la capital cordobesa Ramón Javier Mestre, afirmó que “no hay marcha atrás con el azúcar”. En diálogo con radio Mitre de Córdoba, el funcionario admitió que todavía no se promulgó la normativa pero aseguró que el Ejecutivo la implementará.

Por otro lado, el Centro Azucarero Argentino irá a la Justicia apenas el intendente Ramón Mestre promulgue la ordenanza del azúcar.  “Si él (por Mestre) está decidido a promulgarla, no hay dudas de que la actividad azucarera avanzará en el ámbito judicial”, dijo Fernando Nebbia, presidente de la entidad, en declaraciones que publica el diario La Gaceta.

Jujuy se suma al conflicto interprovincial

Como si fuera poco, el diputado jujeño Alberto Bernis hizo referencia a la polémica por la ordenanza que prohíbe los sobrecitos de azúcar en las mesas de los bares, y afirmó: “El fernet es jujeño, los cordobeses nos lo robaron. La bebida es italiana, pero si buscan datos, llegó a Jujuy antes que a Córdoba”.

El legislador se manifestó de forma irónica sobre el enfrentamiento entre Córdoba y Tucumán, pero dejó en claro de qué lado de la grieta interprovincial está.

El macrismo se mete en la pelea

El pasado sábado, el ministro del Interior de la Nación, Rogelio Frigerio, y su par de Agroindustria, Ricardo Buryaile, opinaron sobre la llamada "guerra del azúcar" y tomaron posición en el conflicto.

"Es como sucede en muchos lugares de la Argentina con la sal, que ya no está en las mesas y hay que pedirla, pero no es que se le niegue a los consumidores. Y el tema azúcar pasa por la misma idea; pero creer que esto va a afectar negativamente el trabajo de los tucumanos es, por lo menos, aventurado", manifestó Frigerio, en diálogo con el diario La Nación.

Además, el funcionario nacional añadió: "A estos temas hay que estudiarlos bien para debatirlos de manera más razonable, y no plantearlos en el marco de esta contienda electoral".

En tanto, el gobernador tucumano Juan Manzur, criticó al ministro del Interior y dijo: "Pensaba que Frigerio le iba a hablar al intendente de Córdoba, que es de Cambiemos, para que elimine esta ordenanza que prohíbe el azúcar, o que iba a hacer algún anuncio de obra para Tucumán, pero no lo hizo".

Por su parte, el ministro Buryaile, en conversación con el diario La Gaceta, respaldó la medida del Concejo cordobés y afirmó: "Quien quiera partidizar el tema está perdiendo seriedad en la discusión de fondo. Tampoco me parece lógico que digan 'vamos a prohibir el fernet, el salame, el maní, y después los alfajores santafesinos, la carne de la Pampa'”.