El gobernador de Santa Fe, Miguel Lifschitz, aseguró que "no es un buen proyecto" el que modifica el impuesto a las Ganancias y obtuvo media sanción en la Cámara de Diputados, y consideró que tendrá "un impacto fiscal importante" para la provincia de Santa Fe.

"Es verdad lo que dice el gobierno, y lo he planteado también, que tiene un costo fiscal importante, que impacta sobre las finanzas del Gobierno nacional en un 50 por ciento, y el resto en las provincias. Y la mayoría de las provincias están en una situación muy comprometida desde el punto de vista económico", sostuvo Lifschitz en una entrevista radial.

 Así, el discurso del gobernador Lifschitz es similar al que plantean los macristas, quienes auguran una pérdida de recursos cercanos a los 3.000 millones de pesos con este esquema de Ganancias. Lifschitz recordó que este año la Provincia dejó de recaudar 2.500 millones de pesos por los cambios aplicados en febrero en el mínimo no imponible, y calculó que esa misma cifra sería el costo en caso de promulgarse la iniciativa opositora que deja a más trabajadores afuera del tributo.

Esta postura es diferente a la de los legisladores socialistas, tanto a nivel nacional como provincial. El bloque del Congreso, liderado por Hermes Binner y Alicia Ciciliani, firmó el dictamen del Frente Renovador y luego votó a favor del proyecto en el recinto. Por su parte, el diputado provincial, Antonio Bonfatti, se manifestó en contra de la propuesta del oficialismo en reiteradas veces.

Antes de la votación, ya había mostrado sus diferencias con el proyecto que obtuvo media sanción: "Hay que buscar un acuerdo, un mecanismo gradual que no desfinancie los recursos de las provincias y que libere a los trabajadores de ingresos medios".