Hubo un fuerte contrapunto entre los fiscales y los legisladores que participaron de la reunión en la que se debía ampliar el pedido de desafuero del senador Armando Traferri. A la cita acudieron Matías Edery y Luis Schiappa Pietra y tras casi tres horas de exposición de audios y explicaciones, la primera sensación es que no hay acuerdo sobre lo que pueda ocurrir en el corto plazo y mucho menos pistas concretas sobre cómo votará la Cámara.

Mientras desde el MPA se promete continuar con la investigación del juego clandestino, en el Senado se tomarán un tiempo para analizar los fundamentos, sin soltarle por ahora la mano a uno de sus integrantes, además referente histórico y hasta hace días jefe del bloque político más importante del cuerpo.   

Los legisladores Lisandro Enrico (General López) y Joaquín Gramajo (9 de Julio), se manifestaron decepcionados, ya que que para ellos “las pruebas no son suficientes” para tomar alguna determinación. Los fiscales, por el contrario, se mostraron optimistas y dijeron haber presentado elementos contundentes.  

El primero en hablar con la prensa fue Enrico, que en la previa había advertido que no lo conformaba el escrito de los fiscales: “Sostienen que Traferri es organizador de una asociación delictiva. Para eso, hay que tener elementos. Esperábamos tener hoy más pruebas, no las hubo. Nos repitieron los mismos audios que ya teníamos hace 48 horas y se trajo sólo una escucha telefónica más”. 

A su lado, Gramajo apuntó contra el manejo de la investigación que vienen haciendo los fiscales: “Les pregunté si habían estado reunidos en la cárcel con Ponce Asahad, antes de que él haga la ampliación de su declaración, esa en la cual nombró a Traferri. Y me reconocieron que sí. Además, ya cuando vi ese video de Ponce Asahad, me pareció que fue un poco conducida su declaración. Se lo hice ver a un abogado y le pareció lo mismo. Y sostengo lo mismo que les acaba de decir Enrico. La documentación que se envió, no es altamente probatoria. Para imputar un delito tiene que haber una prueba fehaciente”. 

Los inicios de la causa

Más allá de las interpretaciones, cabe recordar que la causa que llevan adelante los fiscales se inició con el asesinato de un apostador en el casino City Center en enero de 2020. La investigación del hecho que hicieron Edery y Schiappa Pietra dio con el responsable del crimen y encontró que había sido un atentado, planificado por una parte de la banda Los Monos y ejecutado por un integrante de la misma, Maximiliano “Cachete” Díaz.

En el teléfono que Díaz “descartó” antes de ser detenido, se encontraron conversaciones con un capitalista del juego clandestino en la provincia, Leonardo Peiti, quien se ofreció a colaborar con la justicia como arrepentido. Así, aparecieron datos de una trama que involucraba por ejemplo a los fiscales Serjal y Ponce Asahad. A ambos, se los imputó el cobro de coimas para facilitar ilícitos que debían controlar.

Hace pocos días, fue el propio Ponce Asahad quien pidió ampliar su declaración testimonial, confesando los cobros y nombrando entre otros al senador Armando Traferri como integrantes de la red de influencias en el poder político y judicial, para permitir que funcione el juego ilegal. 

Según explicaron todo este tiempo los fiscales, cada paso dado hasta aquí en términos procesales fue avalado por abundante material probatorio. Ahora, según Schiappa Pietra y Edery, también hay pruebas suficientes para imputar a Traferri. Y se lo dijeron a él mismo, en audiencia informativa el pasado viernes 10.

Para avanzar con la causa, pidieron el desafuero, al que se resiste el legislador. Y al que en primera instancia parece que no accederán con facilidad sus pares en la Cámara de Senadores de la provincia.

Miradas contrapuestas

Con un balance muy distinto del que acababan de hacer Enrico y Gramajo, instantes después fue el turno del encuentro con la prensa de los fiscales. Y allí, Schiappa Pietra señaló: “Tenemos pruebas objetivas, como impactos de antena, llamadas entrantes y salientes. Tenemos audios en los que Peiti dice 'me voy a encontrar con el Pipi’ y luego hay cruces de antenas de los teléfonos, en las zonas de Ricardone o de San Lorenzo, en la casa del senador. Yo creo que hoy después de la reunión estamos más cerca. La verdad, no sabíamos lo que dijo Enrico aquí al salir a la prensa. Dentro de la reunión, no hubo intervenciones en este sentido de su parte y escuchó con mucha atención lo que presentamos”.

Enseguida, también habló Matías Edery: “Creímos que era necesario ampliar por la vía oral lo que habíamos adelantado por escrito. Son muchos senadores y cada cual tendrá su visión. Creemos que las pruebas son contundentes. Tenemos en la causa muchos actos y seguiremos avanzando. Mañana tenemos audiencia con Serjal, por ejemplo. No es solamente el senador Traferri el que está involucrado en esto. Nosotros tenemos ya armada la imputativa y estamos esperando la decisión del Senado. Recordemos que el teléfono del senador no se podía intervenir, por lo tanto no tenemos audios, sino lista de llamados. En el mes de abril, antes de que se haya podido intervenir el teléfono de Peiti, hay contactos telefónicos que duran varios minutos entre ambos”.