El fiscal Federico Delgado sostuvo que tras la investigación por el pago con sobreprecios en la compra de trenes a España y Portugal que provocó la detención del ex secretario de Transporte Ricardo Jaime, “es una de las pocas veces que Argentina tiene pruebas indubitables de la corrupción”.

El funcionario judicial aseguró que "con Jaime la Argentina se transformó en un depósito de chatarra ferroviario" y añadió que el ex funcionario "perdió dinero porque lo malgastó a propósito; eso es delito".

Respecto del ex asesor de Jaime, Manuel Vázquez, también detenido en la misma causa, Delgado apuntó que "tenía una función solo para recaudar". "Vázquez solo emitía facturas para justificar retornos de sumas de dinero", dijo del asesor ad honorem de Jaime.

Tras elogiar el trabajo de la Auditoría General de la Nación (AGN) que derivó en la causa que investiga la compra de trenes realizada en 2005, valuada en 100 millones de euros y cuyos vagones se encuentran arrumbados en depósitos ferroviarios como "chatarra", el fiscal señaló que “es una de las pocas veces que Argentina tiene pruebas indubitables de la corrupción”.

"Si esta causita la unimos con la de (la tragedia de) Once, vemos la película completa, con la asociación entre el funcionario infiel y los empresarios que se apropian o lucran con esa infidelidad”, aseguró Delgado.

Además, recordó que su dictamen acusatorio arranca “de Julio De Vido para abajo”, en referencia al ex ministro de Planificación y superior de Jaime.

A partir de la lectura del trabajo de la AGN "uno puede comprender un montón de cosas más", finalizó.