El presidente del gobierno español, el conservador Mariano Rajoy, anunció este viernes que disolvió el Parlamento catalán, el cese del presidente de la región Carles Puigdemont y la convocatoria a elecciones en la norteña región para el 21 de diciembre, en un discurso tras una reunión extraordinaria del Consejo de Ministros en Madrid poco después de que Cataluña diera otro paso hacia la secesión al declarar su independencia.

"El gobierno ha tomado las medidas necesarias para enfrentar a los que quieren imponer un secuestro a la mayoría de los catalanes y un hurto al resto de los españoles", declaró el líder del Partido Popular español.

Antes, el Senado español aprobó en Madrid autorizar al presidente del gobierno, Mariano Rajoy, a aplicar el artículo 151 de la Constitución española y a destituir al gobierno catalán en pleno, limitar competencias del Parlament y convocar elecciones anticipadas en un plazo de seis meses. La votación pasó por 214 votos a favor, 47 en contra y una abstención, con los votos del PP, del opositor y socialista PSOE y del partido liberal Ciudadanos.

Es la primera vez que se activa este mecanismo en casi 40 años de democracia, con lo que se inaugura un escenario de gran incertidumbre en torno al alcance y la aplicación efectiva de las medidas, en un momento en que la tensión política es máxima en Cataluña, con miles de personas movilizadas en las calles en defensa del proceso de secesión.