Menos de 24 horas después de haber jurado tras 88 días de negociaciones, el nuevo gobierno italiano formado por la derechista Liga Norte y el Movimiento Cinco Estrellas ya genera polémica por sus posturas frente a las parejas homosexuales y su defensa de promoción de las familias "con un papá y una mamá".

"Quiero ser parte de un gobierno en el que las palabras y las ideas sean claras. Habrá un ministro para quien la mamá se llama mamá y el papá se llama papá", planteó el líder de la Liga y nuevo ministro del Interior y vicepremier, Matteo Salvini, horas después de confirmado el nuevo Ejecutivo.

"Veremos de reestablacer un poco de sentido común"; agregó Salvini, reproducido por el diario La Stampa, sumando una nueva polémica a sus ya conocidas posturas para expulsar a 500.000 inmigrantes y endurecer la denominada ley de legítima defensa.

En línea con Salvini, el nuevo ministro de la Familia, Lorenzo Fontana, planteó que "la familia es la natural, donde un niño debe tener una mamá y un papá".

"Para la ley, en este momento, no existen las familias homosexuales", agregó el nuevo ministro en declaraciones publicadas hoy por el diario Corriere.

En ese maco, Fontana se defendió planteando que tiene "tantos amigos homosexuales" y que vivió en Bruselas "donde hay tantos incluso en las instituciones".

Tras las declaraciones de Salvini, uno de los referentes del movimiento gay italiano, planteó en una carta abierta que "ninguno puede arrogarse el derecho de decir que existe un solo tipo de familia" y se mostró "preocupado por nuestros derechos con el nuevo gobierno".

El gobierno 65 de la historia de la república, que tendrá al abogado Giuseppe Conte como primer ministro, inició sus funciones este viernes y buscará que la semana próxima el Parlamento le de la moción de confianza que necesita para su confirmación.