Estados Unidos entrenará a personal ucraniano en una base del estado de Oklahoma para utilizar y mantener el sistema de defensa antiaérea Patriot que le proporcionará a Kiev para reforzar su armamento en la guerra con Rusia, informó este martes el Pentágono.

El vocero del Pentágono, Pat Ryder, detalló que una vez que los sistemas Patriot puedan ser usados en el campo de batalla, el Ejército ucraniano verá aumentadas sus capacidades para la defensa aérea y salvaguardará a la población ante posibles ofensivas rusas.

Por su parte, la subsecretaria adjunta de Defensa para Rusia, Ucrania y Eurasia, Laura Cooper, reveló a la televisora CNN que el programa de adiestramiento en Oklahoma podría durar "varios meses" y admitió no estar en condiciones de dar un "plazo específico".

Asimismo, Ryder expresó que la próxima semana también arrancará el programa de entrenamiento a batallones ucranianos en Europa, pero refirió que no requerirá de un "aumento significativo o ningún aumento en término de despliegue de instructores estadounidenses", consignaron las agencias de noticias Europa Press y AFP.

En este sentido, Rusia ya advirtió en las últimas semanas que reaccionaría en caso de que el suministro de sistemas Patriot a Ucrania fuera acompañado de un aumento de soldados estadounidenses destinados a bases militares en Europa.

Fabricado por el grupo Raytheon, el MIM-104 Patriot es un sistema de misiles tierra-aire desarrollado inicialmente para interceptar aviones que vuelan a gran altura.

Fue modificado en la década de 1980 ante la amenaza de los misiles balísticos tácticos, y se utilizó por primera vez en combate contra los Scuds iraquíes de fabricación rusa en la primera Guerra del Golfo.

Estados Unidos anunció a finales de diciembre el envío de sistemas Patriot a Ucrania en el marco de un nuevo paquete de ayuda económica que coincidió con la visita del presidente Volodimir Zelenski a Washington.

La defensa aérea ha tenido un papel clave para proteger a Ucrania e impedir que las fuerzas rusas controlaran los cielos.

Pero al padecer reveses en el terreno, Rusia comenzó a atacar infraestructuras críticas de Ucrania, interrumpiendo el suministro de electricidad, agua y calefacción a millones de personas.

El viernes pasado, Estados Unidos anunció una nueva ayuda militar a Ucrania que llevó a Rusia a denunciar que la medida representaba desinterés por lograr una solución pacífica al conflicto bélico que estalló a mediados de febrero de 2022.