El abogado Gregorio Dalbón, defensor de la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner, publicó este martes un duro comunicado en el que denunció la sentencia de la Corte Suprema como “una de las decisiones judiciales más graves y vergonzosas desde el regreso de la democracia”. Tras la confirmación de la condena por corrupción en la causa Vialidad, el letrado aseguró que se trata de “una venganza del poder” y no de un fallo legítimo. “Cristina no cometió delito alguno”, afirmó.

Dalbón sostuvo que la resolución del máximo tribunal responde a “un entramado de intereses” que busca proscribir a su defendida, a quien describió como una dirigenta que “transformó la Argentina con justicia social, soberanía política e independencia económica”. En ese marco, denunció la falta de pruebas, la ausencia de dolo, beneficio personal o participación en los hechos investigados. “No hay delito. No hay prueba. No hay justicia”, resumió.

Según el abogado, la condena se basó en un “relato armado fuera del expediente” y en “conjeturas e inferencias” que violan principios básicos del derecho penal. Cuestionó con dureza al tribunal que dictó la sentencia y aseguró que Cristina Kirchner “fue condenada por anticipado” en un proceso que —sostiene— nunca debió haberse iniciado. “Es una construcción artificial que ignora el principio de legalidad y viola todas las garantías del debido proceso”, argumentó.

X de Gregorio Dalbon

Además, Dalbón afirmó que la sentencia representa una “violación flagrante” a compromisos internacionales en materia de derechos humanos, como el artículo 14 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. Acusó a la Justicia de actuar como “una maquinaria de disciplinamiento político” y sostuvo que el fallo “no tiene legitimidad jurídica ni moral”. “Estamos ante una condena incompatible con el Estado de Derecho”, insistió.

En ese contexto, el letrado anunció que ya se iniciaron acciones ante organismos internacionales para revertir la decisión. Entre ellos, mencionó a la Comisión y la Corte Interamericana de Derechos Humanos, el Consejo de Derechos Humanos de la ONU y la Corte Penal Internacional. “La lucha será global”, dijo, y llamó a redoblar los esfuerzos frente a lo que considera una persecución política disfrazada de legalidad.

“El pueblo ya la abrazó. La historia ya la absolvió”, concluye el comunicado, en el que Dalbón afirma que la ex mandataria no está sola ni vencida. “Donde no hay justicia, habrá lucha”, cerró. El mensaje termina con una advertencia: “Esto recién empieza”. En paralelo, el Tribunal Oral Federal N.º 2 debe resolver ahora las condiciones de detención de la ex presidenta, que podría acceder al arresto domiciliario por su edad.