La pandemia por el coronavirus evidenció aún más las pésimas condiciones de trabajo de los repartidores de las apps que por otra parte cumplieron un rol fundamental durante la cuarentena. De marzo hasta la fecha han se movilizaron en diversas ocasiones para exigir ponerle fin a la precarización y aunque su lucha se hizo visible, todavía no consiguen las condiciones ideales.

Por estos días, el Concejo Municipal de Rosario trata distintos proyectos de ordenanza de diversas fuerzas para poder amparar a los trabajadores. Pero en el cuerpo legislativo local no todos están de acuerdo.

El vicepresidente del Concejo, Roy López Molina (Cambiemos), rechazó la regulación que intenta equiparar a los repartidores de las conocidas aplicaciones con el servicio de cadetería tradicional.

Además, se manifestó contra "la sindicalización compulsiva" y "pidió no poner en riesgo a las fuentes y respetar la autonomía de los trabajadores, una característica del sector".

"Son trabajadores autónomos, que cobran puntualmente cada 15 días y que se activan o desactivan de las plataformas libre y voluntariamente. Asimilarlos a las cadeterías tradicionales es un error", argumentó el ex candidato a intendente.

López Molina aseguró que muchos de los repartidores "están conformes con el funcionamiento del sistema".

El referente local de Cambiemos solicitó "mantener la autonomía para evitar poner en riesgo a las fuentes laborales en un contexto complejo para todos los sectores" y no descartó incluir en el debate un proyecto que así lo contemple.

En diálogo con los medios, el concejal remarcó además que "exigir en el año 2020 un local físico obligatorio para poder funcionar sólo suma costos y ninguna solución". Vale aclarar en este punto que, entre otras cosas, los trabajadores de las apps no cuentan con una oficina a la que acudir, por ejemplo, en caso de necesitar utilizar un baño. 

"Una decisión equivocada puede dar lugar a una mayor pérdida de empleos o desaparición de esta modalidad. Debemos debatir pensando en el futuro, en las ventajas de la economía eventual y reconociendo el impacto positivo de la tecnología en la vida de todos los rosarinos", concluyó López Molina.