"El sistema ferroviario es conexión del pasado con un futuro que también tiene que ir sobre rieles", consideró el secretario de Transporte de la Nación, Diego Giuliano, en diálogo con Rosarioplus.com. El funcionario nacional y ex concejal de Rosario dialogó con este medio y celebró la puesta a punto de dos formaciones que significan una nueva frecuencia en el trayecto Retiro-Rosario. Adelantó, además, que se tratará de un "servicio expreso" que unirá las dos ciudades en unas cinco horas. 

Giuliano profundizó también en los ocho trenes metropolitanos que se pusieron en funcionamiento en todo el país y los marcó como un servicio "cada vez más competitivo". "Cuando se invierte, el sistema ferroviario te devuelve", defendió y aseguró que en el presupuesto  2023 "la inversión ferroviaria está plenamente ratificada". También anunció que se está trabajando con Ferrocarriles Argentinos en un "proyecto de Ley de Reparación Histórica Ferroviaria que permita complementar el sistema de transporte". 

- Hace unos días se anunció la puesta a punto de dos formaciones que serán una nueva frecuencia en el trayecto Retiro-Rosario, ¿para cuándo se estima que estará esta nueva frecuencia?

- No hay fecha precisa. Estas dos formaciones, que se llaman Nuestra Señora del Luján y Nuestra Señora del Rosario, son coches adquiridos en el 2012 que tuvieron una utilización por un tiempo y después fueron casi abandonadas en un galpón. Lo que estamos haciendo es iniciar un proceso de reparación. Son formaciones que permiten mayor velocidad, son muy interesantes.

- Se entiende que si se evalúa sumar una frecuencia es porque hay demanda, ¿no?

- Así es. Cuando llegamos al gobierno, la duración del viaje Rosario-Buenos Aires era bastante prolongada. Y si bien ya la bajamos a 6 horas 20 minutos, Trenes Argentinos está trabajando en un servicio expreso, de poco más de 5 horas, con una parada, a lo sumo dos, para poder agilizar este viaje. Es un servicio que se adiciona al de larga distancia que existe hoy.

- Este año se inauguró el tren Rosario - Cañada de Gómez, ¿tienen proyectado inaugurar otros ramales en la zona metropolitana de Rosario o en la provincia?

- Está la posibilidad de seguir avanzando con el servicio a Villa Constitución. Pero hoy en día tenemos el larga distancia Rosario-Buenos Aires, el servicio expreso proyectado, el Cañada de Gómez-Rosario y las paradas de los trenes larga distancia en Serodino, Arroyo Seco y San Lorenzo, uniendo de alguna manera toda la metrópoli. Luego, me toca como secretario de Transporte de la Nación, inaugurar otros tramos. Este año se inauguró también La Banda - Fernández (en Santiago del Estero), el último de los ocho trenes metropolitanos que nos pidió Sergio Massa y que tiene que ver con reconocer que existen metrópolis en la República Argentina que no son exclusivamente el Amba. 

- ¿Cuáles son los otros trenes de cercanía que se han inaugurado?

- El plan metropolitano Tren de Cercanía es un plan que tiene varias facetas. La idea es hacer trenes metropolitanos que espejen los ocho que tiene el Amba, que ya hace muchos años que están. Y en dos años lo hemos hecho. Está el tren Salta-Campo Quijano y la posibilidad de expandirlo a Jujuy; el Tren de las Sierras, que va de La Calera hasta La Cumbre y estamos tratando que llegue a Cruz del Eje, y que además empalma con el Tren Metropolitano de Córdoba. Esta también Rosario-Cañada, La Banda-Fernández y el Tren del Valle, que une Neuquén con Plottier. Así vamos ampliando el servicio de tren de pasajeros en todo el país. Son trenes que, como en el caso de nuestra región, tienen más de 45 años abandonados. Los levantó la dictadura militar y ahora están recuperados y son un servicio cada vez más competitivo.

- Me imagino que en cada una de esas inauguraciones se mueven fibras muy emotivas de la historia del país, ¿Cómo lo vivís?

- El tren tiene una emotividad muy grande, porque si bien tiene la cuestión de la evocación de lo que fue su pasado y el trabajo de tanta gente, también tiene proyección de futuro muy grande. El tren es pasado, presente y, sobre todo, futuro, porque es la forma de conectarse que descomprime fuertemente las rutas, los accesos y permite además un pasaje económico y ecológico. Tiene una gran proyección y también implica una gran inversión. El Estado tiene que invertir recursos muy importantes que vuelven en conectividad, en economías regionales que florecen, en comercio, en turismo. El tren siempre te devuelve. Los que levantaron los trenes o no hacían nada para recuperarlos, lo hacían porque analizaban el sistema ferroviario viendo cuánto entra y cuánto sale, una especie de hoja contable. Pero estuvieron muy errados en su análisis, porque lo hay que hacer respecto al tren es mirar todos los efectos externos de reactivación económica y de conexión cultural. Eso es lo que nosotros desde el ministerio hemos desarrollado. 

- Vos hablabas de la cuestión de descomprimir, ¿Cómo es la relación con las empresas de colectivos de media y larga distancia en este cambio cultural?

- Se estimuló una competencia, o se la planteó como una realidad, pero nosotros no la observamos. Son dos sistemas complementarios, son servicios distintos y no observamos dicotomía o contradicción. Al contrario, vemos una complementación en ambos sistemas y una manera más de descomprimir las rutas argentinas en función de la actividad económica. 

- En diciembre se vencen las concesiones, ¿Qué es lo que tiene pensado hacer el Estado una vez vencidas?

- El Estado ha hecho un cambio importante en esto porque en vez de renovar las concesiones ferroviarias que fueron modeladas en los ‘90 estamos planteando un nuevo sistema que se denomina Vías Abiertas por lo cual la infraestructura ferroviaria es administrada por el Estado, la inversión la hace el Estado, y por el otro la operación ferroviaria puede ser libre, es decir, de participación pública y privada. Y eso permite que quien quiera operar un tren y tenga la capacidad para hacerlo pueda hacerla.    

- Se está hablando mucho del presupuesto y de los recursos que se asignan al transporte del interior, ¿cómo se financia esta reactivación ferroviaria? ¿Está contemplada en el presupuesto 2023?

- La inversión ferroviaria está plenamente ratificada y es una de las inversiones que tienen gran protagonismo en todo el presupuesto. El plan de modernización ferroviario está confirmado. En el presupuesto vemos que hay un acompañamiento a la política ferroviaria que pensamos tiene que ser una política de Estado y no un capricho del gobierno de turno. Hemos observado que en la gestión anterior  hubo un desmoronamiento muy fuerte de las inversiones. Solamente se invertía en lugares que tienen que ver con conexiones comerciales, no relacionadas a la conectividad que un servicio del Estado tiene que tener y como hoy estamos pensando. En cargas también hemos tenido un crecimiento muy grande a nivel ferroviario. Fijate que cuando se invierte, el sistema ferroviario te devuelve: en nuestra gestión aumentó un 76 por ciento la carga por ferrocarril. Y estos son números objetivos. 

- Pensando en el año que viene y las elecciones, ese plan de modernización debe estar en debate.  

- Más allá de los resultados electorales, siempre ratificamos una continuidad en esta política de expansión ferroviaria. No solo es interesante para la conexión de pasajeros, sino porque tiene un impacto muy fuerte sobre todo el sistema de transporte. Estamos trabajando con Ferrocarriles Argentinos para dar lugar a un proyecto de Ley de Reparación Histórica Ferroviaria que nos permita complementar el sistema de transporte, porque el sistema ferroviario hoy representa nada más que el 5 por ciento de cargas y queremos que ese número crezca. 

- La idea de reparación histórica lleva a lo que hablábamos al principio, la cuestión simbólica y emotiva para el país.

- Así es. El sistema ferroviario es eso, conexión del pasado con un futuro que también tiene que ir sobre rieles.