El comercio ilegal crece a pasos agigantados y desde la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came) alertan sobre lo perjudicial de esta situación, no sólo para su sector sino para fabricantes y el sostenimiento de fuentes de trabajo. También revelaron que ya volvió el trueque, práctica habitual durante la crisis de 2001 que desembocó en la abrupta salida del entonces presidente Fernando De La Rúa. 

El último relevamiento que realizó Came mostró que en el 2016 el comercio ilegal movilizó un total de 66.700 millones de pesos en el mercado negro y en diálogo con Rosarioplus.com el referente de la entidad gremial en Rosario, Elías Soso, aseguró que estas cifras “se traducen en menos empleo formal y derechos para los trabajadores y en evasión de  impuestos destinados al bien común como salud, educación, seguridad y obras”.

Los datos corresponden a una muestra de 455 ciudades del país, donde se encontraron 109 localidades con formatos comerciales tipo “saladitas” y un total de 88.791 puestos clandestinos. “El truchaje lesiona no sólo a los fabricantes sino también a los comerciantes que pagan sus impuestos al día y brindan fuentes de trabajo”, remarcó Soso.

Además agregó que “en la ciudad lo que venimos viendo es un crecimiento sostenido de los comercios ilegales, principalmente es zonas marginales y periféricas”, al tiempo que alertó sobre la “reaparición de los trueques, como en las épocas de De La Rua”.

En relación a las causas aseguró que “esto se debe a la pérdida del poder adquisitivo de los trabajadores, a los que la paritaria les quedó muy atrás de la inflación, entonces a la hora de comprar buscan menores precios”.

Ante representantes de Interpol, de la Cámara de Comercio Internacional, fuerzas policiales, fiscales y jueces, este martes se realizó el 29° Foro de la Mesa Nacional Antipiratería. “Combatir la venta ilegal es una decisión política”, destacó Osvaldo Cornide, presidente de CAME, que por primera vez reunió a los tres poderes del Estado comprometidos para avanzar en la erradicación del flagelo. Desde el oficialismo, el diputado nacional de Cambiemos Marcelo Sorgente, presentó un proyecto de ley para regular las ferias de tipo “saladitas”.