El hogar puede ser el espacio más importante de una persona o de una familia entera, y es por esa razón que estar asegurado contra imprevistos puede ser la herramienta más útil de muchos. En la actualidad, teniendo en cuenta que todas las personas no tienen las mismas necesidades y prioridades, las compañías aseguradoras cuentan con diferentes tipos de planes de seguros de hogar para los distintos usuarios y sus intereses, que incluyen algunos servicios muy específicos y otros más generales.    

Si la idea de un usuario es contratar los servicios esenciales de los seguros de hogar, ya es un gran paso para la seguridad de la vivienda porque estaría cubierto contra incendios, robos, coberturas contra granizo y daños por agua. Sin embargo, con una inversión un poco más amplia se puede acceder también a seguros que podrían incluir hasta otros tipos de daños estéticos, roturas de muebles, protección contra catástrofes naturales o protección personal por robos en la vía pública.

Consejos para contratar seguros de hogar: 

En primer lugar, es fundamental averiguar precios y referencias de muchas aseguradoras: antes de contratar el servicio, es importante comparar diferentes servicios y una vez elegida, tener referencias sobre la aseguradora de interés. Es decir, preguntar en el entorno, hablar con otras personas que tengan el mismo seguro, leer reseñas en Internet, y averiguar si suelen cumplir en tiempo y forma con lo pautado.    

Leer la letra chica de todos los contratos: es importante tener en cuenta algunos aspectos antes de contratar el seguro de vida. Por ejemplo, saber si responden rápido ante emergencias, si trabajan todos los días del año, y todas las demás cláusulas que siempre están explicitadas en “la letra chica” del contrato. De esta manera, se evitarán decepciones o futuros problemas con la aseguradora.

Pensar en el seguro de vida en base a las necesidades: si bien al leer todos los servicios que los seguros de vida más vip suelen tener uno termina tentándose y contratando el más amplio, a veces los servicios son muy generosos y superan las necesidades reales.  Por eso, el proceso suele ser al revés, primero hay que pensar en cuáles son las necesidades del hogar y detallarlas en un papel, y luego buscar de acuerdo a las prioridades de cada uno. Obviamente, cuanto más servicios cubra el plan, mejor, pero no hay que perder de vista que a las necesidades esenciales las tienen que incluir siempre.   

Priorizar las aseguradoras que tienen protección también fuera del hogar: en la actualidad, algunas aseguradoras ampliaron su alcance en los servicios que ofrecen y agregaron a los servicios de seguros del hogar la opción de estar cubiertos también en la vía pública. Es decir, al contratar un plan, también se contrata la cobertura más allá de los bienes materiales dentro de hogar. Por ejemplo, robos de dinero en cajeros automáticos o reintegro de dinero que se gasta en realizar trámites para la reposición de documentación importante, como el DNI u otros documentos.   

Por último, también es recomendable averiguar antes de contratar el seguro del hogar sobre los tiempos de duración de los contratos. Es decir, si se puede probar un año y cambiar de plan a uno mejor, o dar la baja tras tantos meses si el cliente no está satisfecho o no puede pagarlo y todas otras dudas que surjan al momento de decidir contratar un seguro para el hogar.