Polymont, el arte de engañar y dejar a sus empleados en la calle
Son 27 trabajadores en Rosario que hace dos meses vieron esfumarse su empleo de un día para el otro. La empresa, con base en Buenos Aires, no responde.
Tan desapacible como ir a trabajar y descubrir de repente que el empleo desapareció. Esa es la situación que enfrentan 23 hombres y mujeres desde hace más de dos meses, puesto que la empresa para la que trabajaban –Polymont Soluciones Integrales de Ingeniería– cerró de un día para el otro, sin explicaciones. Ahora lograron la atención del Concejo Municipal y meterse en la agenda política de la ciudad para reforzar su reclamo.
Son 27 empleados los que trabajaban desde la sucursal Rosario, en Ayacucho 5260, con contratos de tercerización para mantenimiento industrial de empresas de primera línea: John Deere, Banco de Córdoba, Air Liquide, Acindar, entre sus clientes.
El 13 de abril le dieron la orden de embalar muebles y útiles, documentación, todo, con el argumento de que se mudarían de edificio. Cuando volvieron a trabajar al día siguiente, hallaron la persiana baja y el local vacío. Y nunca más cobraron un peso.
María Saura, compañera de uno de los damnificados, expresó este jueves al móvil de Sí 98.9: "Estamos igual que el 13 de abril. Es desesperante porque no tenemos ninguna respuesta. Estaban embalando y desarmando para una supuesta mudanza que nunca sucedió. Ya se adeudaban sueldos, horas extras, vacaciones. Se mandaron telegramas. No hubo respuesta, solo una lavándose las manos", dijo la mujer.
La situación ocupó la reunión de la comisión de Producción y Empleo en el Concejo. También el diputado Carlos Del Frade metió el asunto en la agenda de la Legislatura.
"Somos 27 familias que no podemos solventar nuestras necesidades básicas. No podemos creer que en medio de una pandemia, con los despidos prohibidos, vivamos esta situación", lamentó Saura.
Polymont se dedica a diversas tareas de mantenimiento industrial. Comenzó en 1996 en Córdoba, para tomar contratos de las fábricas automotrices. Se expandió hacia Buenos Aires, con oficinas en CABA y un centro de operaciones en Don Torcuato, además de la filial de Rosario, Córdoba y Misiones. Según información periodística, la sucursal Córdoba también cerró de manera abrupta.