La empresa Aguas Santafesinas (Assa) ya adelantó que solicitará al Ejecutivo provincial una actualización tarifaria del 89 por ciento en 2017, anuncio que generó polémica. Incluso, desde el ente que regula los servicios sanitarios (Enress) dijo que es el “Estado quien debería definir si se traslada el aumento al usuario”.

Assa pretende subir la factura del agua de manera escalonada, con un primer aumento del 38 por ciento en el primer bimestre de 2017 para completar un 90 por ciento total con tres subas de 11 por ciento.

“La empresa podrá tener argumentaciones que determinan que este es el cálculo para mantener costos, pero me parece que como tiene una relación tan estrecha con el Estado, que sea el Estado con decisiones políticas quien defina si esto es lo que debe trasladarse al usuario”, explicó en medios Oscar Urruty, presidente del Enress.

Esta declaración hace foco en que el mayor accionista de la empresa es el Estado provincial con el 51% del capital social, y además es a quien la empresa le hace la propuesta de aumento para su autorización. Una vez que el Ejecutivo reciba la solicitud de aumento, deberá girarla al Enress que es quien convoca a audiencias públicas en Rosario y Santa Fe.

“Si bien sabíamos que la empresa quería revisar las tarifas, las características son las públicas y parecen de gran impacto para el bolsillo de los usuarios. Esto particularmente creo que debe analizarse detenidamente, más allá de los instrumentos legales de la audiencia pública”, afirmó.