El dólar superó la barrera de los 29 pesos y las consecuencias del nuevo salto en el valor de la moneda extranjera ya se comenzaron a sentir. Desde este domingo, los combustibles en las estaciones de servicio de todo el país volvieron a aumentar hasta un 5%.

Las principales cadenas de abastecimiento empezaron a aplicar los incrementos que, en principio, iban a ser de un 3 por ciento máximo, como habían acordado los empresarios y el ex ministro de Energía Juan José Aranguren.

Sin embargo, ahora la cartera está a cargo de Javier Iguacel y las petroleras insisten en que el aumento en el precio de los hidrocarburos debe ser mayor.

Este incremento se suma al del 5 por ciento autorizado por el Gobierno para el primero de junio pasado, el cual había sido acordado en mayo. En aquella ocasión se había establecido que el próximo aumento iba a ser en julio y de hasta 3% para todas las naftas y gasoil comercializadas en el país.

Según la Confederación de Entidad del Comercio de Hidrocarburos (CECHA), el precio de los combustibles en la Argentina todavía tiene un atraso del 30 por ciento y es el sexto más bajo de los valores de comercialización entre los países de la región.

El organismo sostiene esto a partir de un informe que realizó en octubre pasado sobre la base del precio del barril de petróleo Brent, que se toma de referencia en la Argentina, y el tipo de cambio de ese momento. La entidad explicó que el barril valorado en pesos pasó de cotizar $ 1.252,45 el 23 de octubre de 2017 a $ 1.976,95 según el valor de esa fecha.