El juez neoyorquino Thomas Griesa puso dos condiciones para acceder al pedido del gobierno argentino de levantar las medidas cautelares que impiden al país pagarle a los bonistas reestructurados. Si bien el magistrado ratificó su decisión de hacerlo, condicionó la acción a que el Congreso derogue la “Ley de Pago Soberano” y la “Ley Cerrojo” y que pague a todos los holdouts que llegaron a un acuerdo con el país hasta el 29 de febrero. 

El pronunciamiento de Griesa se conoció este miércoles, tras la audiencia celebrada el martes en Nueva York en la que los holdouts pidieron al magistrado que extienda por treinta días más el plazo para pronunciarse en torno al pedido formulado por Argentina para dar de baja las restricciones que pesan sobre el país.

Según el texto de la decisión, la corte concede al pedido de Argentina de revocar las medidas cautelares contra la República si se cumplen dos condiciones previas: La primera es que Argentina derogue "todos los obstáculos legislativos a la solución con los tenedores de bonos", incluyendo la Ley de bloqueo y la Ley de Pago Soberano. La segunda pide que "para todos los demandantes que entraron en acuerdos hasta el 29 febrero de 2016" Argentina realice "el pago completo en concordancia con los términos específicos de cada uno de los acuerdos".

Griesa fijó además un plazo de 48 horas para que los holdouts disconformes con su pronunciamiento puedan presentar un exhorto ante la Cámara de Apelaciones de Nueva York.