Aunque la curva de nuevos contagios de coronavirus sigue en descenso, y por esto muchos rosarinos se relejaron, varias actividades continúan suspendidas o con restricciones importantes que impiden su normal funcionamiento.

Los empresarios gastronómicos nucleados en AEHGAR anticiparon que diciembre y enero serán determinantes para la continuidad de muchos establecimientos. Desde el sector advierten que de seguir trabajando con las actuales limitaciones no se podrá hacer frente al pago de aguinaldos, a los vencimientos de servicios, a las moratorias que vencen en enero y a los plazos de pago de alquileres.

Además, alertaron que la quita en diciembre del Programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción (ATP) que actualmente subsidia el 50 % de los sueldos, llevará al cierre de locales y a la pérdida de cientos de puestos de trabajo.

Para evitar esta situación límite desde AEHGAR solicitaron:

  • Que la Provincia interceda para que se mantenga el ATP para el sector porque, si bien hay locales que al tener espacio exterior el comienzo de la temporada estival los ayuda, hay gran cantidad de bares y restaurantes que no tienen esa posibilidad. Estos establecimientos no pueden afrontar el pasivo originado por la pandemia de no contar con ayuda gubernamental.

  • Que se disminuya la distancia exigida, pasando de 2 metros a 1,5. Actualmente los salones están habilitados a un 30% de su capacidad real. Esto es contraproducente por dos razones: hay bares que ni siquiera pueden abrir con esta limitación, por lo que se estaría eliminando espacios que podrían funcionar como receptores de personas; y por el otro, es difícil organizar un espacio con tanta limitación que permita brindar capacidad. Si no hay lugar, la gente no entra al bar, por ende se juntan en otro lado. Pierde el bar y pierde la salud pública.

  • Extensión del horario de cierre. AEHGAR solicita que se pueda abrir de lunes a miércoles hasta las 1 AM; jueves y domingos hasta las 2 AM y viernes y sábado hasta las 3 AM. Esta segmentación se pensó acorde a la demanda y a la naturaleza de que los fines de semana la gente se junta más. Con un bar cerrando a las 00 hs en plena temporada de verano no es extraño pensar que la mayoría se terminen reuniendo, de todas maneras, en otro lugar.

  • Exención del TGI; medidas puntuales para el pago de EPE y otros servicios; facilidad de acceso a líneas de crédito subsidiadas  y toda otra medida que a criterio de los gobiernos municipal y provincial, proteja las fuentes de empleo y la continuidad de las empresas.

"Como se evidencia, el sostenimiento de las medidas restrictivas expone a los establecimientos a un empeoramiento de su situación económica, disminuyendo el consumo y por ende la facturación con la que deben pagar sueldos e impuestos", señalaron desde AEHGAR.

"La época de despedidas, la cercanía a las fiestas de Navidad y Fin de Año y el inicio de la temporada estival cambiarán el escenario presente en los meses anteriores. La acumulación del pasivo generado durante estos meses y las obligaciones que los establecimientos deberán afrontar para continuar con la actividad se sumarán a un panorama que comienza a ser distinto. Se necesita una estrategia que organice a la población en los próximos meses, teniendo en cuenta que la situación económica y las consecuencias de esta pandemia harán que muchas personas permanezcan en la ciudad. Las herramientas no pueden ser las mismas para una situación que ya ha cambiado. Solicitamos, por el bien de la actividad y de sus empleados que se dé lugar a las peticiones aquí mencionadas", concluyeron desde la entidad, a través de un comunicado.