Los cuatro locales de Garbarino amanecieron cerrados por segundo día consecutivo y sin dar ningún tipo de novedades a sus empleados con quienes mantiene además un retraso salarial de 45 días. 

En diálogo con Sí 98.9 el Secretario Gremial de empleados de Comercio, Juan Gómez, aseguró que el conflicto no se debe a baja en las ventas sino a un vaciamiento intencional del lugar. "Acá tenemos trabajadores de Rosario y de otras provincia que están sin respuesta. Los contactos con los directivos son directamente con Buenos Aires ya que los gerentes de comercio, según nos dicen, no tienen información", afirmó. 

En este sentido detalló que "se están adeudando mes de marzo, abril y bonos correspondiente al año pasado. El Ministerio de Trabajo está notificado, hicimos la presentación denunciando un lock out patronal y esperamos las actuaciones en este sentido".

Por el momento son, solo en la ciudad, 56 trabajadores distribuidos en las cuatro sucursales que la empresa de venta de electrodomésticos tiene en Rosario.

La crisis económica que se atraviesa con la pandemia como telón de fondo pero, sin dudas, no como única causante va haciendo mella en la zona más comercial de la ciudad. El microcentro y los paseos de compras más emblemáticos de la ciudad se van desertizando. El cierre de Garbarino se suma al de Falabella y el de Borsalino, dos íconos de la ciudad cada cual en su rubro.