La Audiencia Nacional española accedió este viernes a extraditar a Brasil al presunto cerebro financiero de la trama de corrupción de Petrobras, Rodrigo Durán Tacla, con la condición de que el gobierno de Michel Temer garantice que hará lo mismo con un español reclamado por delitos similares.

La sala que lleva el caso dio luz verde para que la justicia brasileña juzgue a Durán por un delito de cohecho, blanqueo de capitales y pertenencia a organización criminal, ya que entiende que no ha aportado pruebas de que su vida corra peligro en Brasil.

Durán, con doble nacionalidad brasileña y española, alegó en la vista de extradición celebrada en mayo que está amenazado de muerte en Brasil y aseguró que viajó a España no para huir de la Justicia sino porque tenía "miedo", reprodujo la agencia de noticias EFE. En cambio, los magistrados españoles estiman que no ha acompañado esas afirmaciones con "un mínimo soporte probatorio" y "tampoco aporta dato alguno que permita considerar que las autoridades brasileñas no vayan a adoptar medidas necesarias para garantizar su seguridad".

Consideran que "se trata de un delito común, no político, o por razones de raza, creencia religiosa, nacionalidad o convicciones políticas de ningún tipo". No obstante, la autorización de la entrega aún debe ser avalada por el gobierno español.

Durán fue detenido en España por su supuesta responsabilidad en la mayor trama de corrupción en la historia de Brasil, el caso Petrobras, en el que ya han sido condenados directivos de la petrolera estatal y de las principales constructoras del país, además de varios políticos.

La investigación a Petrobras es la de mayor trascendencia en Brasil sobre blanqueo de dinero y desvío de fondos públicos de la empresa nacional petrolera a partidos políticos y miembros del Ejecutivo, que ha llegado a salpicar al ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva.