El analista económico del Centro de Economía Política (CEPA), Guido González, dialogó con Ariel Bulsicco en Si 98.9 sobre esta tendencia  donde la dinámica de precios vuelve a encender las alarmas. Según el relevamiento realizado por este centro de estudios, en enero la carne mostró un incremento promedio de los cortes de carne vacuna del orden del 2,3%.

En términos interanuales, los cortes de carne incrementaron su precio 55,5% por encima de la inflación. A la inversa de lo que ocurrió en el mes de diciembre, donde los “cortes caros” fueron los que más incrementaron su precio, en enero, los “cortes económicos” fueron los que más aumentaron hasta un 6,2%.

Durante enero, los cortes considerados económicos aumentaron 2,7% y 1,3%. Según el INDEC, los precios de los alimentos en general llegaron a incrementarse hasta un 5% donde si bien, la carne redujo su precio respecto a los fuertes aumentos de diciembre, tuvo en enero una dinámica moderada mientras que en febrero, parece haber renovado el impulso alcista.

Sin embargo, sobre estos datos González, precisó que no fue la carne quien ejerció una fuerte presión sobre los datos inflacionarios emitidos por el INDEC ya que los incrementos más notorios se dieron en frutas y verduras con un 23% y harinas que aumentaron un 66.1%. Si destacó que en el interanual (enero 2021 a enero 2022) arroja que el aumento fue de un 55.5%, lo que se nota rápidamente en las carnicerías cada vez que los consumidores hacen sus compras.

 Asimismo informó que en enero los sustitutos de la carne como el pollo mostraron un incremento del 4,9% aunque los incrementos vienen muy por debajo de otros productos, pero con una gran brecha de precio con la carne.

Vale decir también que en términos interanuales, las variaciones de algunos cortes continúan por encima del nivel general de precios de la economía (+50,9% aproximadamente) mientras que otros, de gran consumo interno, lograron quedar por debajo del promedio, sobre todo por el elevado punto de comparación que deja enero 2021: asado (48,7%), vacío (48,9%) matambre (46,5%).

En tanto, desde los sectores agro ganaderos, justifican los aumentos de precios aduciendo que cada vez hay menos oferta,  no obstante el analista económico refutó esta teoría y dijo que dentro del informe de CEPA se aclaran los motivos de los incrementos. Si bien reconoció que en enero pudo haber alguna incidencia sobre la oferta teniendo en cuenta que las altas temperaturas, y un factor determinante como la sequía. “Esta situación no pasó en meses previos, donde el ingreso de cabezas de ganado al Mercado de Liniers se mantuvo o incluso fueron más”, advirtió sobre su cotejo de datos.

El precio de la carne se mantuvo en enero, pero en febrero arrancó con aumentos

De todos modos, a partir del primero de febrero se confirma la dinámica alcista del precio de ganado en pie. El 16 de este mes, el precio alcanzó $286,80 para el novillo de 300/390 kg, es decir, 14,2% de aumento respecto al precio al 28 de enero de 2021.

Aunque los datos son parciales, al 16 de febrero de 2022 se observa una recomposición de cabezas comercializadas en el Mercado de Liniers (en valores similares al mismo período en 2021 o enero de ese mismo año), modificando el comportamiento observado en enero del 2022, donde efectivamente se había reducido la oferta.

Fundamentalmente para González lo que genera una fuerte presión en la relación de precios para el mercado interno es el incremento de las exportaciones, donde la carne funciona como un commodity, donde los sectores que manejan el negocio “buscan que se pague el producto a precio internacional” y los productores por conveniencia van en detrimento de la oferta doméstica.

A la vez dijo que los acuerdos de precios son una buena herramienta de control y que en el caso de la carne “funcionaron para generar una disociación positiva, para que en la mesa de los argentinos pueda haber algunos cortes populares, como es el caso del asado”.

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#NadieEsPerfecto - Guido Gonzalez - CEPA by Sí 989