El presidente Alberto Fernández le solicitó al titular de YPF, Guillermo Nielsen, que deje sin efecto un aumento del 5% previsto en los precios de los combustibles, con el objetivo de evitar un incremento de la inflación.

El incremento, que había sido anunciado en los últimos días, iba a tener un efecto cascada sobre toda la cadena de abastecimiento, ya que Yacimientos Petrolíferos Fiscales S. A controla el 55% del mercado.

Fuentes de la petrolera Axion le aclararon a Ámbito Financiero que si YPF no remarca, ellos tampoco lo harán, y el mismo camino seguirá Shell. Por lo tanto, la suspensión del aumento se implementará en todas las estaciones de servicios del país.

Nielsen consideraba que los precios de los combustibles venían desactualizados y que era necesario un incremento para garantizar la rentabilidad de las petroleras, pero el presidente de la Nación decidió que la prioridad es controlar la inflación.

A lo largo de 2019, la nafta aumentó en nueve oportunidades, hasta acumular un salto del 41%. La de este lunes iba a ser la décima suba, primera durante el gobierno de Fernández, y llevaría a 46% el alza acumulada global.