El Fondo Monetario Internacional (FMI) señaló este martes que los gobiernos deberían intensificar las inversiones públicas para impulsar sus economías después del impacto masivo de la pandemia de coronavirus.

En un documento, el organismo señaló que "la economía mundial se ha visto gravemente dañada por la crisis de la salud con el sector de servicios paralizado, muchas personas temen por sus puestos de trabajo y los gobiernos experimentan niveles de deuda vertiginosos".

Más adelante, el FMI puntualizó que "para las economías avanzadas y de mercados emergentes, aumentar la inversión pública en un 1 por ciento del PBI, crearía 7 millones de empleos directamente y entre 20 millones y 33 millones de empleos en general si se consideran los efectos macroeconómicos indirectos", En su último Monitor Fiscal, el organismo detalló que "calculando los "efectos amplificadores de la inversión pública" en períodos de alta incertidumbre, aumentar la inversión pública en un 1% del PIB "podría fortalecer la confianza en la recuperación e impulsar el PIB en un 2,7 por ciento, la inversión privada en un 10 por ciento y el empleo en 1,2 por ciento "después de dos años" si las inversiones son de alta calidad y si la carga de la deuda pública y privada existente no debilita la respuesta del sector privado al estímulo ".

Más adelante, subrayó que "cuando los gobiernos aumentan sus inversiones públicas, señalan su compromiso con el crecimiento y la estabilidad y eso tiende a impulsar la inversión privada también".

El documento del FMI muestra que "para los países con fácil acceso a la financiación, pedir préstamos para financiar inversiones públicas de buena calidad será una estrategia eficaz porque la caída global de las tasas de interés ha puesto un listón más bajo para que los proyectos de inversión sean beneficiosos".

El FMI sugirió que se debería destinar más dinero a la atención médica, la vivienda social, la digitalización y la protección del medio ambiente.

Luego agregó que invertir en "infraestructura digital será esencial para que los gobiernos puedan promover el distanciamiento social y, al mismo tiempo, reducir la brecha digital dentro de sus sociedades".

"Incluso con el distanciamiento social, la inversión pública es factible y puede entregarse rápidamente si los gobiernos toman cuatro pasos: invertir ahora mismo en mantenimiento; revisar y reiniciar proyectos prometedores que fueron retrasados en la preparación o implementación; acelerar proyectos en trámite para llevarlos a cabo dentro de los próximos dos años; y comenzar a planificar inmediatamente nuevos proyectos para la postcrisis", enfatizó el FMI.

En tanto, una misión del Fondo Monetario Internacional llegará este martes al país, en el marco de las negociaciones encaradas por la Argentina para acordar un nuevo programa para refinanciar la deuda por US$ 44.000 millones con el organismo multilateral.

La delegación estará encabezada por Julie Kozack, directora adjunta del departamento del Hemisferio Occidental del FMI; y Luis Cubeddu, jefe de misión para Argentina.

Kozak y Cubeddú se unirán al representante permanente del FMI en la Argentina, Trevor Alleyne, para iniciar lo que se entiende como una etapa exploratoria del contexto en el que se solicitará el nuevo programa, atendiendo a las condiciones macroeconómicas y sociales del país, y al diálogo con el Gobierno y distintos sectores.

En particular, mantendrán reuniones con el ministro de Economía, Martín Guzmán, y con el titular del Banco Central, Miguel Pesce, luego de que la semana pasada se lanzaran medidas económicas para recomponer el nivel de las reservas.

Asimismo, como parte de la misión, el equipo se reunirá también con representantes del Congreso, del sector privado, sindicatos y de la sociedad civil.

La misión será corta; permanecerá en el país alrededor de cuatro días, ya que "está prevista su vuelta el fin de semana" a Washington, indicaron fuentes del FMI.

Las mismas fuentes confirmaron que dentro del plan hay una nueva visita prevista para noviembre próximo, aunque aún falta definir la fecha precisa.

La nueva misión de noviembre tendría un carácter más profundo para avanzar en las negociaciones, a diferencia de la actual, que buscará tener una primera impresión de la realidad argentina por parte del mismo equipo que lideró el análisis de sustentabilidad de la deuda, a principios de 2020.