Según la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came), la venta ilícita ascendió a 5.557 millones de pesos en agosto de 2016, un número que alerta al sector por el perjuicio que le ocasiona. El dato corresponde a una muestra de 455 ciudades del país, en las que se encontraron 109 localidades con formatos comerciales tipo “saladitas” y un total de 88.791 puestos clandestinos.

"En medio de la recesión y la caída generalizada en las ventas minoristas, el comercio ilegal sigue expandiéndose en el país. En seis meses, la cantidad de vendedores irregulares creció 11,4 % aumentando la oferta de mercadería ilícita y generando un mayor desplazamiento del consumo desde el sector formal al informal", detalla el comunicado.

Además detalla que en agosto se detectaron un récord de 656 saladitas en 109 ciudades de la Argentina con 61.721 vendedores. Además, en las centenares urbes recorridas se encontraron 27.070 manteros, el 77,3 % de ellos ubicadas en las localidades con saladitas que, sumados a los vendedores de esos predios, dejan un total de 88.791 comerciantes informales en el país en sus diferentes modalidades. Es sobre estas cifras que se estima que la venta ilegal al público alcanzó los $ 5.557 millones en agosto y rondará los $ 66.700 millones en todo 2016.

También seg{un su análisis de los datos, el crecimiento del comercio clandestino de los últimos seis meses se debe a tres factores: la falta de controles que da lugar a que ese fenómeno se expanda; el aumento en la cantidad de gente que buscando precios más accesibles cambiando incluso consumo formal por informal; y por último, el mayor desempleo que generó que más individuos encontraran en la venta indebida una vía de supervivencia.

"Esto - concluyen - además de afectar al mercado formal, precariza las condiciones de producción, comercialización y empleo de la economía".