El juez Juan Andrés Donnola afirmó que fue difícil encontrar testigos del homicidio de Sergio Luján, joven asesinado en 2011, al parecer, por el comisario Mario Alberto Urquiza, actual jefe de Logística de la Policía de Acción Táctica. En aquel entonces, el efectivo policial trabajaba en la seccional policial de Pueblo Esther.

“La causa no tenía imputados identificados”, señaló el magistrado en diálogo con Rosarioplus.com. “Trabajando en el Sistema de Conclusión de Causas notamos que había un caso donde un joven, que fue arrestado, muere por un disparo en la espalda”, comentó en magistrado.

El 1 de diciembre de 2011, Sergio Ezequiel Luján murió como consecuencia de un disparo efectuado por el jefe de la comisaría de la zona de Pueblo Esther. Según la defensa del efectivo policial, el joven recibió un tiro en medio de una balacera entre el supuesto ladrón y los uniformados. Sin embargo, se comprobó que la única arma que efectuó disparos fue la del jefe policial.

“Nos costó traer testigos para que declaren, por el tiempo y el miedo. La gente no quiere hablar porque le dicen que no se meta con la policía”, dijo Donnola y agregó: “Pudimos obtener varios testimonios coincidentes y se identificó al policía en una rueda de reconocimiento”.

El caso del comisario Urquiza pertenece al viejo sistema penal, por lo que está siendo tratado en el Sistema de Conclusión de Causas, un procedimiento especial para regular la adecuada finalización de todas las actuaciones iniciadas antes de la entrada en vigencia del nuevo sistema de Justicia Penal y que no se rigen por el mismo.

“Además, está siendo investigado otro policía que no estuvo en el lugar pero intervino en el hecho”, manifestó el juez y concluyó: “El fiscal Carlos Covani pidió la prisión preventiva del funcionario policial y yo se la concedí. El detenido está a disposición mía y seguramente ampliará su defensa”.