Las entidades prestadoras de servicios de Salud de Rosario, Santa Fe y Rafaela expresaron su preocupación por una deuda corriente que el Instituto Autárquico Provincial de Obras Sociales (Iapos) mantiene con las instituciones, y anticiparon que si no se regulariza la situación se restringirá la atención a los afiliados, que son empleados y pasivos de la administración estatal provincial.

“Estamos sufriendo una situación preocupante, desde el punto de vista económico y financiero, con la obra social Iapos”, reveló este jueves Rodrigo Sánchez Almeyra, vicepresidente de la Asociación de Clínicas y Sanatorios Privados de Rosario, y continuó: “Recibimos a las autoridades de Iapos con muchas expectativas, pero estamos desilusionados con las respuestas, ya han pasado cuatro meses y no sabemos qué va a suceder en 2024 con la obra social”.

Según el empresario, la obra social de los empleados públicos santafesinos “no tiene una deuda abultada, sino una deuda corriente que está atrasada”. Además, no se actualizó el valor de los aranceles que se abonarán a partir de marzo. “Con la crítica situación que viven los sanatorios necesitamos que esas deudas se pongan al día”, apuntó.

En cuanto a las medidas que podrían tomar los prestadores, Sánchez Almeyra anticipó: "Desde el lunes próximos vamos a tener que restringir atenciones". 

Cabe destacar que en el departamento Rosario Iaposcuenta con unos 165 mil afiliados quienes podrían dejar de recibir atención ante ésta situación.