Integrantes de la entidad ambientalista rosarina, Taller Ecologista, participaron esta semana de las negociaciones en París, donde se discute el texto de un Tratado Global de Plásticos el cual pretende ser una herramienta legal para proteger la salud humana y al ambiente de dicha contaminación. La convención la integraron más de un centenar de países, representantes del sector privado, académicos  y organizaciones de la sociedad civil.

La participación de las organizaciones ambientales Unplastify, Asociación Sustentar, Consciente Colectivo, Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN) y Taller Ecologista busca incidir en la elaboración del mejor texto posible que incluya la reducción del consumo de plásticos, y que impulse una transición justa, inclusiva y participativa.

Según un estudio de la consultora Dalberg, difundido por Taller Ecologista en un comunicado, la ingesta semanal de microplásticos por parte de los seres humanos alcanza los 5 gramos. Esta cantidad se obtiene a partir del consumo de alimentos, aire y agua contaminados. El crecimiento de la producción de plástico en la última década es alarmante, pasando de 2 millones de toneladas en 1950 a 400 millones de toneladas en la actualidad, lo que agrava la problemática ambiental.

En respuesta a esta problemática, el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) aprobó en marzo de 2022 la creación de un comité intergubernamental con el objetivo de negociar un Tratado Global de Plásticos. Del 29 de mayo al 2 de junio se llevará a cabo la Segunda Sesión del Comité Intergubernamental de Negociación (INC-2), que busca abordar la preocupante contaminación por plásticos en todas las etapas de su ciclo de vida, desde la extracción de recursos naturales hasta su eliminación. Esta iniciativa cuenta con el respaldo de representantes de 175 países, incluida Argentina.

En el contexto actual, diversas organizaciones ambientales como Consciente Colectivo, Fundación Ambiente y Recursos Naturales, Taller Ecologista de Rosario, Unplastify y Asociación Sustentar, han subrayado la necesidad de abordar el problema de la contaminación por plásticos desde su origen. En este sentido, enfatizan que la forma más efectiva de frenar la contaminación es reduciendo al máximo la producción y consumo de plásticos, especialmente de aquellos de un solo uso y de corta vida útil, que resultan prescindibles y problemáticos. Asimismo, destacan la importancia de eliminar el uso de aditivos tóxicos en los plásticos.

“Estuvimos participando de estas negociaciones con el objetivo de incidir y contar con el mejor tratado posible para que incluya la reducción y del consumo de plásticos, que se atribuya distintos tipos de responsabilidades según cada país y que busque una transición justa, inclusiva y participativa”, manifestó a RosarioPlus Mirko Moskat, de Taller Ecologista.

Es alarmante señalar que en lo que va del siglo XXI se ha producido la mitad de todo el plástico fabricado en la historia de la humanidad. Además, cada año entre 19 y 23 millones de toneladas de residuos plásticos llegan a lagos, ríos y océanos, lo que afecta a más de 800 especies marinas y costeras, según informa el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA). “Si no se toman medidas urgentes, se prevé que la contaminación en los océanos se cuadruplique para el año 2040”, adviertió Mijael Kaufman, coordinador del área de Política Regional e Internacional de Consciente Colectivo.

Diversas organizaciones han emitido una alerta en la que indican que se han detectado más de 6.000 sustancias en plásticos, de las cuales al menos 1.500 son químicos preocupantes. Según Leandro Gómez, coordinador del programa Inversiones y Derechos del área de Política Ambiental de FARN, es fundamental exigir la transparencia en cuanto a los componentes químicos presentes en estos materiales, ya que actualmente no se tiene acceso a esta información.

"El reciclaje, a pesar de los esfuerzos realizados, sigue siendo insuficiente. La composición química de los plásticos limita su capacidad de reciclaje a solo unas pocas veces, a diferencia de otros materiales como el vidrio o el metal, que pueden reciclarse varias veces sin perder calidad. Según National Geographic, los plásticos pueden reciclarse solo entre 2 y 3 veces máximo, lo que significa que no pueden ser reintroducidos infinitamente en la cadena de producción y, en algún momento, tendrán que ser descartados", afirmó Clara Subirachs, coordinadora de Políticas Públicas de Unplastify.

Aunque aún se encuentran en curso las negociaciones internacionales, este tratado representa un importante progreso y una clara comprensión de la necesidad de actuar de manera urgente. La contaminación causada por los plásticos es un problema global que requiere de acciones inmediatas.