El ex dirigente de Boca Juniors Marcelo London adelantó que verán "cómo están los jugadores" afectados por las agresiones en las inmediaciones al estadio Monumental y los gases arrojados por la policía, y a partir de eso se tomará una determinación sobre la realización de la final de la Libertadores con River Plate. 

"Pedimos que nos pongamos de acuerdo, vinimos a jugar un partido, no a una guerra y hoy nos encontramos con algo grave. Veremos cómo están los jugadores", aseguró afuera del vestuario. Leonardo Jara, Sebastián Villa y Pablo Pérez recibieron golpes y como
consecuencia, dijo London, se encontraban cortados. 

"No sé qué pedirá el presidente (Daniel Angelici) en la reunión con la Conmebol, entiendo que buscará ponerse de acuerdo para ver si pueden
jugar", apuntó. El micro de Boca llegó por avenida del Libertador y allí se encontró con el público local, que arrojó diferentes elementos  contundentes contra los vidrios y los rompieron, a la vez que las fuerzas de seguridad reprimieron a los simpatizantes con gases, que afectó a los futbolistas visitantes.