El segundo partido de Los Pumas en el Mundial de rugby que se desarrolla en Inglaterra resultó un cómodo paseo para los albicelestes, que aplastaron por 54-9 a Georgia en el estadio Kingsholm de la ciudad de Gloucester. Y por haber apoyado como mínimo cuatro veces la ovalada detrás de la línea rival, el seleccionado nacional consiguió sumar lo que le llaman un “punto bonus”, es decir, una unidad más como premio estímulo a la mayor emoción de este deporte: el try.

En realidad, fueron mucho más que cuatro tries. Argentina apoyó la pelota siete veces en el ingoal rival a través de Tomás Lavanini, Tomás Cubelli, el rosarino Juan Imhoff (2), Santiago Cordero (2) y Martín Landajo. Su score en el partido correspondiente a la segunda fecha del Grupo C se completó con dos penales, un drop y tres conversiones de Nicolás Sánchez y dos conversiones de Marcelo Bosch.

Georgia marcó todos sus tantos con tres penales del fullback Merab Kvirikashvili en la primera etapa, que terminó 14-9 en favor del conjunto 'albiceleste', que cometió ocho faltas en ese período.

Después de la paridad en el segmento inicial, el conjunto argentino arrasó al seleccionado europeo durante el segundo tiempo, con mucha superioridad en el scrum y el line, lo que se tradujo con contundencia (seis tries) en el marcador.

En la Zona C, Nueva Zelanda es el puntero con nueve unidades; Los Pumas suman 5; Georgia, 4; Tonga, 1 y Namibia, 0. 
El seleccionado argentino, que llegaba de una derrota con los All Blacks en el debut, se medirá el próximo 4 de octubre frente a Tonga, mientras que una semana más tarde chocará con Namibia, ambos encuentros en el estadio de la ciudad de Leicester, con una capacidad para 32.312 espectadores.

La segunda fecha del Grupo C había comenzado el jueves con un nuevo triunfo de Nueva Zelanda ante Namibia por 58-14.

(Télam, desde Gloucester)