Tras una maratónica ola de calor que arrasó la ciudad en las últimas jornadas, la lluvia dijo presente al fin este miércoles en la ciudad. Y no vino sola: llegó con alerta por “tormentas fuertes” y “abundantes precipitaciones” para todo el sur santafesino. Así que a salir a la calle con paraguas o piloto, sin excepción.

El Servicio Meteorológico nacional prevé  chaparrones y tormentas, algunas fuertes para este miércoles. El agua llegó para quedarse: el jueves también se espera que siga el agua.

Los vientos serán moderados del sector este cambiando a regulares del sudeste con ráfagas, pero vientos cálidos, nada de frío. De hecho, hasta este miércoles a la tardecita permaneció vigente un segundo alerta. “Alerta amarilla” por las altas temperaturas, el segundo de los cuatro niveles que existen en esa clasificación. La advertencia por el calor, cesó a la ahora 19. 

¿El alivio? Parece que no llegará como se espera: para hoy se esperan de máxima 28 grados, y para los próximos tres días, las máximas rondarán siempre los 30 grados.  Hay quienes dicen que si llueve poco, es peor a que no llueva porque el cemento no alcanza a enfriarse y la humedad crece. Habrá que esperar y ver.