Un holandés alquiló una grúa para bajar hacia la ventana de su novia, cantarle y pedir su mano. Sin embargo, la grúa no estaba debidamente asegurada y terminó estrellándose contra el techo del edificio contiguo.

En la ciudad Holandesa de Ijsselstein, un hombre alquiló una grúa para acercarse a la ventana de su novia y pedirle matrimonio. El vehículo no estaba bien asegurado y el brazo mecánico terminó terminó estrellándose contra el techo del edificio contiguo.

Debido al accidente, se debieron evacuar tres propiedades. Al llegar una segunda grúa a retirar la accidentada, esta se soltó y volvió a caer sobre los tejados. A pesar del inconveniente, nadie resultó herido y la novia aceptó la propuesta.