La ONG Missing Children fue la que –a través del Ministerio Público Fiscal de Buenos Aires- remitió información al MPA acerca de la divulgación y publicación de ponografía infantil en Internet. Por tal motivo, Merlo ordenó que este miércoles se realizaran dos allanamientos en viviendas particulares de Firmat y otro en una institución deportiva de ésa ciudad del sur provincial.

Las tareas fueron realizadas por la Policía de Investigaciones (PDI) y por personal de la Dirección Especial de Prevención y Sanción del Delito de Trata de Personas, y permitieron el secuestro de computadoras; notebook; celulares; y pen drive que serían de propiedad de los acusados. En las próximas horas, los dispositivos informáticos serán abiertos –con la correspondiente autorización judicial- a los fines de analizar su contenido.
 
Merlo explicó que “uno de los dos acusados utilizaba tres nombres de fantasía y subía imágenes pornográficas de niñas desde un mismo domicilio postal. El otro hombre –agregó el fiscal- hacía lo propio, pero con el mismo nombre de usuario y desde dos servidores de Internet con diferentes IP”. 

“Una de estas personas también utilizaba un servidor wi-fi de un club firmatense para subir las imágenes a Internet”, agregó el fiscal, quien hizo hincapié en que la institución deportiva no tiene ningún tipo de relación con esta investigación. “Más aun, sus autoridades se pusieron a total disposición y nos pidieron que investigáramos sus computadoras para saber si habían sido usadas. En todos los casos, el resultado fue negativo”, enfatizó.
 
Los allanamientos realizados ayer fueron posibles gracias al trabajo previo de la ONG Missing Children, cuya sede central está en Estados Unidos. Esta ONG internacional envió la información al Ministerio Público Fiscal de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Esos datos consisten en reportes que realizan de los videos e imágenes de pornografía infantil en Internet. Al MPA de Santa Fe llegan gracias a acuerdos firmados previamente para trabajar conjuntamente.

“A nosotros nos informan que desde una determinada dirección de IP, un usuario X subió a Internet 14 imágenes de contenido pornográfico infantil”, explicó Merlo. “Además, nos detallan la hora en la que se subió la información, la red social o el prestador utilizado”, detalló el fiscal y agregó: “También nos informan el domicilio postal en el que están los servidores de Internet con las direcciones de IP utilizadas”.

“Una vez que recibimos estos reportes, comenzamos lo que llamamos el trabajo de campo en coordinación con la Policía de Investigaciones (PDI) para corroborar los domicilios, las personas que viven en el lugar, los perfiles de Facebook y las direcciones de correo electrónico de los presuntos implicados. Con toda esa información, procedemos a realizar los allanamientos”.