Caranta: No pudo con el penal de Torassa. Acertó el sector del remate, pero “se pasó”, y dejó la impresión de que era atajable. Hizo peligrosa vista ante un remate de Villarruel. Bien con los pies.

Salazar: Cometió algunos errores importantes. El más serio, la ingenua falta sobre Puch que terminó en penal. De los tres partidos que jugó, el de anoche fue el más flojo.

Gómez Andrade: Firme y expeditivo como de costumbre. El penal a Puch nace de un pelotazo muy largo de Toranzo, que debió intuir. Sus yerros en los pases ya son moneda corriente.

Donatti: Cumplió, aunque en alguna contra padeció la velocidad de los hombre del Globo. A diferencia de los últimos partidos, esta vez no pudo acertar en el área rival.

Villagra: Hizo el gol y fue uno de los que más probó al arco. Gran despliegue por la banda. Pasó mucho al ataque, y lastimó. Terminó extenuado y fue reemplazado en el final.

Musto: Incómodo, especialmente en el primer tiempo, jugando como volante interno. En el complemento, aportó quite, pero no hizo buen partido a la hora de equilibrar al equipo.

Domínguez: Pagó más caro que nadie el precio de la improductividad del equipo en la primera parte. Lo sustituyeron en el entretiempo. Muy bien en la distribución. Le costó cortar el juego.

Colman: Con aciertos y errores, fue conductor del equipo. Muy activo en los primeros 20, pero no pudo mantener el ritmo. Le falta en lo físico, y en el complemento se notó.

Delgado: Su mejor partido. Desequilibró, casi, cada vez que se lo propuso. Una gran acción suya abrió el camino al gol de Central. Fue el que más remató al arco. Estuvo cerca de convertir, aunque tal vez le faltó confianza en la definición.

Cervi: Ausente sin aviso. Dio apenas once pases. Bien tomado por la marca en cada sector que ocupó, nunca gravitó. Lo reemplazaron antes de los 20 del segundo tiempo.

Ruben: Tuvo pocas chances. Anticipó de cabeza al arquero Díaz, y falló por poco. Sumó su tercer partido consecutivo sin convertir. El equipo extraña su aporte goleador, pero lo abastecen poco.

Los que ingresaron

Niell: Entró mejor que en partidos anteriores. Movedizo y agresivo. Pesó poco y nada en el área rival. Su único remate al arco generó el rebote que terminó en el gol de Villagra.

Aguirre: Jugó casi 30 minutos. Sus primeros dos centros le entregaron chances de gol a Ruben y a Delgado. Después, entró en la confusión general del equipo.

Montoya: Muy poco tiempo en cancha como para evaluarlo. Intervino poco, y lo hizo correctamente.

El árbitro 

Herrera: Su mayor acierto: bien ubicado, sancionó correctamente el penal por la torpe falta de Salazar a Puch. A veces, se mostró muy celoso en cuestiones reglamentarias. Y en otras ocasiones no lo hizo. Amonestó con criterio dispar. Expulsó bien a Puch.

El técnico

Coudet: La propuesta sigue siendo saludable. Pero últimamente, con eso no alcanza. Los resultados así lo marcan: en os últimos 6 juegos apenas logró 1 triunfo y 5 empates (8 puntos sobre 18). El equipo arriesga y sigue invicto, es cierto. Tanto como que ante Huracán le faltó agresividad y aceleración en tres cuartos de cancha. Además, en su afán de ir a buscar, especialmente en el segundo tiempo, el equipo quedó desequilibrado y expuesto. Flota la sensación de que Central está sumando muy poco en relación a lo que pone en juego. Para seguir arriba, hay que equilibrar esa ecuación.